La oposición derogó ayer en el Congreso el decreto de la estiba. Se trata de la tercera vez en la historia que se rechaza un decreto ley. El ministro de Fomento fue incapaz de negociar con el sector, que desconvocó ayer la huelga, y de asegurarse que los diputados apoyaran su propuesta. Aunque lleva razón en que hay que acatar la norma de la UE y evitar sanciones, debe conseguir consenso.