Hoy, 8 de septiembre, se celebra el día de la patrona de la ciudad de Córdoba, la Virgen de la Fuensanta. La fundación del templo conmemora el hecho milagroso que acontece hacia el año 1420, cuando se produce la aparición de la Virgen a Gonzalo García. Décadas más tarde se construye el santuario y el humilladero que protege a la fuente, el popular pocito, cuyas aguas curaron a la mujer e hija de Gonzalo, y en el que tiene lugar el hallazgo de la imagen mariana. El día 2 de octubre de 1994, fue coronada por el Nuncio Tagliaferri. Al mismo tiempo el papa Juan Pablo II la denominó Patrona de Córdoba, concretamente en el decreto de coronación, a la misma altura que San Acisclo y Santa Victoria. Esta María nos habla también en los tiempos actuales, pues no hemos de olvidar que los evangelios nos cuentan virtudes de la Virgen, como: a) María fue una mujer valiente al seguir el mandato de Dios. Así la primera prueba de la valentía de María es la aceptación de la concepción de Jesús, y de la continuación de su embarazo. María pudo pensar que tuvo, un sueño. Pudo haber replanteado su primera aceptación de la concepción, y en uso de la libertad, haber tomado otra decisión. Con la segunda decisión de continuar con su embarazo, incluso se expuso a ser juzgada y condenada a morir por lapidación, si José la hubiese denunciado. María se había quedado embarazada antes del matrimonio, y los vecinos no sabían si había habido alguna infidelidad de María.

El canto del Magníficat se podría ver como un canto de alabanza a Dios y de autoproclamación de la libertad personal. b) María también es profeta cuando anuncia el derribo de los arrogantes, soberbios y poderosos. Ya adelanta el Reino de su hijo. c) María, conocedora de la exclusión social por ser mujer, y madre soltera, desde el Magníficat, profetiza las bienaventuranzas de las personas explotadas, discriminadas y excluidas. d) Con José tuvieron que ir a Belén a empadronarse, y desde allí huir a Egipto, para defender la vida de su hijo. María se convirtió en una inmigrante más en Egipto. e) María fue una mujer observadora e inconformista con la marginación de la mujer, su maltrato y prostitución. Su hijo debió ser objeto de muchas preocupaciones suyas. No se decide a tomar mujer, no forma familia, permanece en Nazaret hasta los 30 años más o menos. ¿En qué piensa?. Además predicando un Reino de Dios con una visión diferente a la que daban los rabinos de su tiempo. María lo sigue y hasta la Cruz, como madre, también como creyente, y como discípula. No es justo para con María tener una visión de ella como mujer pasiva y solo acogedora de las penas. María fue una mujer encarnada en la historia concreta, y desde luego, por su Fe, Amor y Valentía extremas, se convirtió por derecho propio en Pilar de la Iglesia. Todo esto es algo que debemos reflexionar en su fiesta y procesión.

* Licenciado en Ciencias Religiosas