En el razonamiento probabilístico -el que usamos al hacer una predicción o pronóstico- solemos usar los llamados heurísticos, atajos que nos ayudan a razonar. Lo malo es que al usarlos se producen sesgos o errores sistemáticos. Uno de ellos es la falacia de la conjunción. Para ejmplificarla, he replicado ‘el problema de Linda’, un test muy conocido de Kahneman y Tversky, pero he cambiado el enunciado.

Linda es una chica de 31 años, soltera, brillante, licenciada en Ciencias Políticas, que colabora con diferentes oenegés. Decidme en vuestra opinión si Linda: ¿Trabaja con niños, en un banco o en una librería? ¿Vota a Ciudadanos, a Podemos/IU, al PSOE, al PP o no vota?. ¿Es Linda feminista? ¿Ha pensado usted "librería, Podemos, feminista"? El 90% de los encuestados (400) han respondido lo mismo. Casi el cien por cien dijo que Linda era feminista. Solo una dijo "banco, PP y no es machista ni feminista". Y luego reconoció que había escrito eso porque "como has dicho que ha estudiado Ciencias Políticas, todo el mundo va a creer que vota a Podemos". ¿Por qué han contestado así?

Eso fue porque yo mencioné que Linda había estudiado Ciencias Políticas y esto se asoció de forma inconsciente con Podemos y con el feminismo. Pero hay cátedras de Ciencias Políticas en toda España o fuera de España. En Francia, por ejemplo, es una carrera asociada a gente conservadora. En España es la carrera de elección para gente que después quería hacer las oposiciones al cuerpo diplomático o a altos puestos de la Administración del Estado. No solía ser una carrera de muertos de hambre.

También la mayoría de los que respondieron ha hecho una asociación automática: ‘feminismo = Podemos’. Pero el PSOE es un partido con muchas organizaciones feministas que trabajan en su seno, desde su inicio. Y han supuesto que una persona que trabaja en Podemos no puede trabajar en un banco. Por la asociación ‘Podemos = anticapitalistas’.

Es obvio el intento de Íñigo Errejón de desmarcarse de Podemos para la candidatura de Madrid. El logo que ha diseñado es verde, no morado, e imita en color y tipografía al de Manuela Carmena, para sumarse a la marca ‘Ahora Madrid’ y desmarcarse -al menos en imagen- de su partido.

Errejón es perfectamente consciente de que la marca Podemos se asocia a extrema izquierda. Y de que si quiere ganar Madrid, una ciudad conservadora, que durante muchos años ha votado PP, con muchos emprendedores trabajando e inversores radicados allí, tiene que desmarcarse de Podemos como sea. De ahí viene, creo, la escenificación (repito: escenificación) de sus diferencias con Pablo Iglesias.

Errejón ha estudiado comunicación política, no lo veo tan ingenuo como para dar puntada sin hilo. El problema de Linda se lo conoce de sobra.

* Escritora