En una sociedad que se acostumbra cada vez más y desgraciadamente a vivir subvencionada por el dinero público, existen iniciativas que se salen de lo común. Hace ya unos años conocimos a tres soñadores que decidieron abrir un espacio nuevo en Córdoba, donde compartir y poder facilitar carreras empresariales desde abajo.

En CoSfera, en la Sierra de Córdoba y después en pleno centro, nació y creció una comunidad, en parte presencial y en parte virtual. Sus cohabitantes poníamos en común experiencia y conocimiento acerca de lo que hacíamos en esta ciudad, a la que tanto le cuesta abrirse al mundo. Fueron años de ilusión, donde a diario convivían pequeños empresarios inquietos de muy diversa índole y semanalmente se invitaban a emprendedores a compartir su trayectoria y entre todos se sumaba o quizás se multiplicaban las oportunidades.

Se organizaron los inolvidables startup weekend, eventos de 52 horas donde se ponían en marcha entre todos micro proyectos empresariales, alguno de los cuales sigue aún en nuestra sociedad.

Como todos los proyectos, el alma la lideraban sus creadores, pero en este caso no solo ellos. Junto a Pili Manrique, Antonio Fernández y Miguel Calero, han pasado por CoSfera cientos de inquietos cosféricos que han puesto parte de su alma en común.

Allí hemos reído, aprendido, discutido y crecido, cordobeses y amigos de todas partes, jóvenes y no tan jóvenes. Se me vienen a la cabeza muchos nombres que de alguna u otra manera han participado, no me gustaría olvidar a ninguno, pero sería imposible, Hidabe, Merinas, Fuensanta Galán, Alfonso de Cabo, Jesús Duarte, Elena Hipo, los Deblur, Romeo, Adelita, Rafa Rodríguez, Labrador, Criandonaranjos, Fernández Bretones, Obrero, Chapel, Violet, Verónica , Campanero, Hiram, César...

Ahora nos anuncian que CoSfera cierra sus puertas, y yo propondría que solo lo haga de manera física, no virtual. Que proyectos de alma cordobesa no se pierdan sino que nos organicemos para que esta comunidad cosférica siga viva y aportando ideas a la sociedad. Quiero agradecer a sus creadores estos años tan buenos que nos han brindado y a todos sus habitantes el talento compartido.

Hasta siempre, CoSfera.

* Abogado