Los informes de la secretaría general y la intervención del Ayuntamiento lo dejan claro: si el Consistorio es la única administración presente en el organismo, y si es el único socio que aporta dinero, el Consorcio de Turismo no tiene sentido como tal y está abocado a su disolución y, en todo caso, a la integración en la estructura municipal. Así lo imponen, según los informes técnicos, la ley de reforma de la administración local y el Tribunal de Cuentas, que cuestionan la continuidad de un ente que se nutre solo de la aportación del Ayuntamiento de Córdoba. Se propone adaptar a la nueva normativa este órgano público-privado, creado el año 2002 entre la administración local de la capital y los empresarios (CECO y la Cámara de Comercio), y en el que, con un presupuesto de 970.000 euros para el 2014 y unos 25 trabajadores, el Ayuntamiento aporta 900.000 euros y la pequeña cantidad restante se obtiene de la facturación de algunos de sus productos y servicios.

El Consorcio de Turismo ha sido escenario en los últimos tiempos de discrepancias entre el gobierno municipal y los empresarios, y aun de los propios empresarios entre sí. El gobierno local ya indicó hace tiempo a la parte empresarial que si debía financiar por completo este organismo también marcaría los criterios de trabajo. El paso que se plantea ahora abunda en esa declaración de intenciones, en esta ocasión partiendo de argumentos legales y señalando la obligatoriedad de lo recomendado.

Es difícil que las organizaciones empresariales puedan sufragar la parte que les correspondería en el presupuesto del consorcio. La Cámara ya ha dejado claro que no puede hacerlo, con lo que pronto habrá que tomar decisiones, que podrían pasar por unirse al Patronato Provincial de Turismo de la Diputación (una solución aparentemente lógica, pero de difícil ejecución), por incorporarse a algún organismo autónomo municipal, como el Imdeec o por constituirse como delegación en el Ayuntamiento.

En cualquier caso, el problema planteado debe resolverse pronto y con inteligencia, visto que el turismo es en estos momentos el principal foco de actividad económica de la capital cordobesa. Y esto lo sabe el gobierno local, pues sin ir más lejos, en el Pleno que aprobó los presupuestos el jueves pasado, el teniente de alcalde de Hacienda, José María Bellido, destacó la inversión que se dedicará al turismo. Y debería buscarse alguna fórmula que permitiera mantener abierta la colaboración con la parte empresarial, que es, a fin de cuentas, beneficiaria de estos servicios turísticos y que debe trasladar a las instituciones las necesidades e ideas de los sectores implicados.