Estimado personal de Diario CORDOBA: hace unos días estuve en su maravillosa ciudad y quedé enamorado de ella. Hice un poema de aquel paraíso, y tras enseñarlo a conocidos y amigos, bromeando decían que lo mandara al Ayuntamiento de allí, pero yo recordé vuestro periódico, que leí mientras desayunaba, y me pregunto si quisieran publicar el poema en su diario. Este es el poema: "Mis pasos lleváronme hasta allí, hasta la orilla de aquel meandro soslayado del puente romano; escucho al río Guadalquivir gritar, por un puente que le muerde y clava sus dientes en sus aguas, haciendo con ese gesto leve una sonrisa tan perfecta y clara que al verla, siento como me llama; siento el viento susurrar mi nombre tan de cerca, pero tan distante y en un instante de aquella tarde en el ocaso, casi de noche, hermosa, te entregué el corazón. ¿Qué tenías, bellísima Córdoba? ¿Qué hizo, que fueras tú mi pasión? ¿Ser la ciudad natal del gran Góngora? ¿Tal vez ser hogar de la mezquita? ¿Los cordobeses? ¿Las cordobesas? ¿Esa esencia impregnada infinita? ¿Un verso que por sí solo versa sobre tu magnífica belleza? Quién sabe, yo por lo menos no. Tienes algo, pero aún no sé qué, en mi corta estancia, pude ver o sentir, pero me conquistó.

Adrián Marín

Murcia