pRELIGION

nContinúa la humillación II N

***Mary Mesa

***Baena

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Señor director, hoy la humillación recae en uno de los miembros de la Real Hermandad del Corpus de Baena y hermano mayor durante los años 2001 a 2004, Paco Alba, que a su vez es responsable voluntario de Cáritas desde hace 30 años, catequista junto a su esposa de prematrimoniales y prebautismales durante 40 años; en definitiva, militante de base de nuestra iglesia a la que quiere, respeta, milita y dedica muchas horas de su tiempo atendiendo a los más desfavorecidos. Este militante el pasado día 3 de junio asistía como es su costumbre a misa diaria, en este caso de difunto en la iglesia auxiliar de Santa María la Mayor de Baena, y al finalizar la misma, ya puesto en fila para dar el pésame a la familia, se le acerca el párroco, y todavía consiliario de la Real Hermandad Sacramental, Miguel David Pozo León, revestido de haber celebrado y le dice: "He dudado hoy de darte o no la comunión, en lo sucesivo no te acerques que no te la voy a dar". A lo que el amenazado, sorprendido, responde que esa es su responsabilidad y continúa don Miguel David: "No se puede ofender al obispo por la mañana y acercarse a comulgar por la tarde", respondiendo el aludido que él no era consciente de haber ofendido a nadie y menos a su obispo. Este sacerdote sabe que no está autorizado para excomulgar a nadie, lo hizo simplemente para humillarle haciendo acusaciones falsas e injustas. Señor director, por lo visto la ofensa fue el escrito enviado por esta persona y publicado en el Diario CORDOBA de fecha 3 de junio titulado Continúa la humillación .

Ante estos hechos el ofendido acude a su pastor y obispo destrozado por las acusaciones y le envía una carta en demanda de amparo y defensa de unos hechos que nunca debieron ocurrir y dar una solución justa, al día de hoy la respuesta ha sido el silencio que, de continuar, se convertiría en complicidad. La indefensión de este militante de base de nuestra iglesia ante lo sucedido, provocado injustamente por un sacerdote, no es admisible, se mira por otro lado y eso no es bueno, sería necesario quizás recapacitar y actuar. Dios siempre perdona, me consta que esta persona ya ha perdonado. Que no se entiende esta forma de actuar, pues es verdad, pero la realidad demuestra que se puede tirar por tierra toda una trayectoria de vida y militancia callada de un cristiano y no hay nadie que le defienda en esa iglesia a la que pertenece. Una pena, señor director, pero es así.

pSOCIEDAD

nCuando te hacen dañode pequeño N

***Manuel Enríquez Becerra

***Sevilla

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Cuando a una persona le hacen daño de pequeño, se le quedan las secuelas para toda la vida. Tanto es así que llegas a coger odio a las personas que te hicieron daño. Escribo con propiedad. Conozco casos de personas que de pequeños han vivido en un pueblo. Y a la gente del pueblo no les han caído bien y los han mirado por encima del hombro y los han marginado, y eso a esas personas se les ha quedado grabado para toda la vida, que se marchan del pueblo en cuanto pueden y ya no vuelven más. Es muy triste, pero es así. En los pueblos también existen los gay. Pero como los pueblos son tan machistas dicen que ser gay es un vicio y un pecado. Pues estas personas no están bien miradas en el pueblo. Es más, los llaman "mariquitas", para hacer más daño. Cuando en los pueblos hay cada caso de personas casadas que son gay. Pero por el mero hecho de estar casadas ya son mirados de otra forma. El daño a una persona de pequeño hace mucho daño tanto es así que no vuelves más a tus raíces. Por eso los pueblos están cada día más solos, porque la gente emigra a la ciudad, ya no solo por el caso que he expuesto anteriormente. También mujeres que han sido criticadas por tener un novio o amigo y se han quedado embarazadas. En los pueblos, por desgracia todo tiene que ser tapujo y en silencio, para que no se entere nadie de tu vida.