pANCIANOS
nIndignación y vejación en el trato a las personas N
***María Castro
***Córdoba
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Hoy, un día de noviembre, mi despertar no ha sido nada relajante, sino todo lo contrario. Al asomarme al balcón veo con indignación como vuelven a tratar a las personas del casco antiguo, Patrimonio de la Humanidad, sin esta última para los que vivimos aquí. Sacaban a una viejecita los trabajadores de sanidad o ambulancias, a las 8,30 horas, con ocho grados de temperatura, una persona enferma y la depositaban en una camilla con una manta que tapaba lo justo, con toda la cara y el cuello al aire y el traqueteo sobre los tacos de granito la paseaban por toda la calle Ambrosio de Morales, hasta la calle María Cristina, que es donde dejan las ambulancias.
Me pregunto ¿cómo es que no entra la ambulancia hasta la plaza Séneca, cuando ha pasado por la calle todo el material de construcción del Museo Arqueológico, maquinaria incluida?, ¿cómo no entra la ambulancia si todos los días entra el camión de la basura que como mínimo es bastante más voluminoso?
Si familiares y vecinos no denunciamos estos hechos, dudo mucho que los que lo hacen repentinamente, rectifiquen.
pDERECHOS DE LA INFANCIA
nDía Universaldel Niño N
***Francisco Baena Calvo
***Palma del Río (Córdoba)
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Ayer, día 20 de noviembre se celebró el Día Universal del Niño. En 1954 la Asamblea General de la ONU recomendó que todos los países instituyeran el Día Universal del Niño, fecha que se dedicaría a la fraternidad y a la comprensión entre los niños del mundo entero y se destinaría a actividades propias para promover el bienestar de los niños del mundo.
El día 20 de noviembre del 1959 marca la fecha en que la Asamblea aprobó la Declaración de los Derechos del Niño: El derecho a la protección especial para desarrollarse física, mental, moral, espiritual y socialmente (art. 2); a un nombre y a una nacionalidad (art. 3); a los beneficios de la seguridad social y cuidados especiales, incluso atención prenatal y postnatal; a disfrutar de alimentación, vivienda, recreo y servicios médicos (art. 4); a un tratamiento, educación y cuidados especiales para los niños física o mentalmente impedidos (art. 5); al amor y comprensión para el desarrollo de su personalidad (art. 6); a recibir educación que será gratuita y obligatoria por lo menos en las etapas elementales (art. 7); a recibir protección y socorro en todas las circunstancias (art. 8); a ser protegidos contra toda forma de abandono, crueldad y explotación (art. 9); a ser protegido contra prácticas que fomentan la discriminación racial, religiosa, o de cualquier otra índole (art. 10).
Aún queda mucho camino que recorrer para que todos estos derechos del niño se vean cumplidos en muchos lugares de la tierra. Defendamos "la Civilización del Amor", que es una propuesta fundada sobre los valores universales de paz, solidaridad, justicia y libertad, que encuentran en Cristo su plena realización. Digamos sí a la vida, a la solidaridad, a la libertad, a la verdad, al diálogo, a la paz, al respeto de las culturas y al respeto de la naturaleza para que los derechos del niño sean protegidos y defendidos.
