¿En realidad? Esas dos palabras, son las que utiliza el anónimo más conocido de la historia de Córdoba. Acompaña información y, tras recordar las normas que exigen la obligación de que los miembros del jurado sean independientes, deja caer esa pregunta, que estoy seguro que va a pasar a la historia. ¿En realidad?

Lo que se aporta en el sobre que ha recibido el alcalde de Córdoba en su despacho en días pasados es de tal contundencia que sobran muchas palabras más. A mí me gusta ser breve y práctico, muy práctico, en nuestro despacho. Cuando alguien de confianza se va por las ramas enseguida hay algún compañero que le apremia con dos palabras que resumen una filosofía: "al neto". Así me lo enseñaron en el IESE y en San Telmo.

Bueno, pues, al neto seguimos yendo con el tema de la Capitalidad.

Tan solo unas horas después de denunciar lo obvio, comenzamos a analizar datos del proceso que no se correspondían con la legalidad. Cuando sabes que tienes la razón, a veces no tienes claro cuál será el camino pero, como Julia Roberts en mi película favorita, Erin Brockovich, ahí están los grandes retos para la profesión más bonita del mundo, que es la abogacía.

Ampliamos recurso con las nuevas razones encontradas. Cristina Ortego Nuere, miembro del jurado, tenía intereses directos, tanto en el Consejo Vasco de la Cultura como en la Universidad de Deusto, entidad que ha participado en apoyo a la ciudad designada. El director de San Sebastián, Santiago Olaso, había sido fichado por el Ministerio de Cultura durante la fase decisiva de la elección. Con anónimo o sin anónimo esto era más que suficiente para invalidar la designación del jurado.

Entre nuestro recurso de reposición, a las veinticuatro horas del anuncio del presidente del jurado, y la situación actual han pasado muchas cosas en poco tiempo. En el camino hemos sentido el aliento de Córdoba. Miles de cordobeses nos han apoyado, muchos magníficos abogados de Córdoba nos han llamado para ofrecernos su colaboración y su fuerza. Qué ilusión me haría que los abogados de esta ciudad nos uniéramos en esta causa que es de todos. Córdoba ha tenido siempre fama en España de ser un foro de buenos juristas.

También nos ha ayudado Carlota Alvarez Basso; ojalá algún día pueda celebrar la designación de Córdoba 2016. Su disposición y su empuje son fruto de ese idilio con Córdoba que también truncó el mazazo de la tarde del fallo.

Cuando ha llegado el informe, nos da la razón a los que pensábamos que no había que esperarlo. Donde el presidente del jurado dijo digo, ahora el jurado dice Diego. Pero ya se ha avanzado tanto que nadie ha dado peso al informe de un jurado que ya está deslegitimado. Primero, por su propio presidente que motivó el fallo en circunstancias ajenas al proceso y, después, por el interés de una de sus componentes a favor de la designada. Tiene además más irregularidades, pero iremos poco a poco. Como dato indicativo de lo que tuvieron que ser aquellas últimas horas de deliberación, el informe explica que el voto fue secreto, cuando este hecho lo prohíben las normas del proceso.

Esta semana salta la sorpresa, la luz, la que acompaña al que está haciendo bien su trabajo. Como decía Picasso: "Si la inspiración existe, que te coja trabajando". Se recibe un sobre desde Francia, sede del Parlamento Europeo, con unos documentos, al parecer realizados por Cristina Ortega, en los cuales, desde el conocimiento interno del proceso como miembro del jurado que es, aporta pautas para colaborar con la candidatura de San Sebastián. Al conocer los documentos recibidos, el vicerrector de la Universidad de Deusto, Roberto San Salvador del Valle, declaró que la colaboración de la miembro del jurado Cristina Ortega, como mucho puede tratarse de una nota que Cristina redactó para el decano. ¿Le parece poco a este señor?

Que un miembro del tribunal de oposiciones, que solo reparte una plaza, transmita información del examen a uno de los candidatos, invalidaría radicalmente cualquier elección.

La actitud valiente del alcalde, poniendo todo lo recibido inmediatamente en manos de esa Córdoba despertada, ha sentado muy bien en la ciudad. Nuestro despacho agradece su gesto y el de su equipo de sumarse a nuestra impugnación.

Mis amigos han pasado de aquello tan cordobés de esto no va a servir para nada, a pedirnos opinión con cara de incredulidad. Es curioso: una ciudad en la que todo el mundo se manifestaba convencido que lo de la capitalidad había sido un apaño, pero en la que todos estaban dispuestos a tragárselo.

Si hace tan solo quince días, nos dicen cómo estamos hoy, ni nos lo creemos. Nosotros estamos disfrutando de nuestro trabajo; siempre he dicho que, si lo que haces no te divierte, déjalo. Y, simplemente, solo con llegar a donde estamos hoy doy por bien empleado nuestro esfuerzo. Pero no vamos a parar aquí.

El pasado miércoles pusimos encima de la mesa de la Comisión Europea todo lo realizado hasta ahora y pedimos su amparo ante la falta de respuesta del Ministerio de Cultura. Me temo que, tras las promesas de la ministra de abrir un expediente, no hay más que el toque que le ha dado la Comisión Europea al conocer nuestra denuncia de los últimos días. No seamos ilusos, para que Córdoba se ponga en su sitio, el cual, como cada día es más evidente, perdió en el camino del proceso de designación, hay que seguir llevando el asunto hacia los tribunales ordinarios.

Pensamos que la ciudad ha despertado de la pesadilla de la irregular designación. Dejadnos soñar con CORDOBA CAPITAL EUROPEA DE LA CULTURA 2016, Por derecho.

* Abogado