Desde hace tiempo los bancos han cambiado la operativa para con sus clientes. Mientras antes los cuidaban, y ofertaban rendimientos por el ingreso de sus ahorros, ahora observamos cómo después de hacer una limpia de trabajadores y oficinas, utilizan a los depositarios para que sean estos los que les hagan su trabajo. Pretenden, mediante los ingresos en los cajeros, por medio de las tarjetas o libretas, que hagas el trabajo que ellos tienen la obligación de hacer, traspasando y cobrando, eso sí, por la no atención al cliente, o haciendo gestiones por internet, para eliminar las vergonzosas colas que nos encontramos diariamente en las oficinas, donde tienes que solicitar cita para cualquier gestión que no sea contratar seguros, planes de pensiones, créditos o cualquier otro producto, tradicional.

Que son empresas privadas y que se deben en muchos casos a sus accionistas es verdad, pero esto qué significa, ¿que los depositarios, no tienen derecho a ser atendidos de forma personal? Sobre todo las personas mayores que no saben, o no quieren utilizar este tipo de medios, porque además están expuestos a un gran peligro al sacar dinero en la calle, y deben de abonar su correspondiente canon, por hacer el trabajo que ellos han hecho siempre. Nos están haciendo prisioneros con nuestros dineros.

Citas para solucionar cualquier problema, oficinas donde no puedes sacar dinero líquido, horarios para abonar recibos, transferencias, cobros por no ser cliente, etc. Todo esto, después de haber facilitado y consentido el Gobierno despedir a miles de trabajadores, tras haber ayudado al sistema bancario, con miles de millones de nuestros impuestos (todavía pendientes de devolver). Así se consigue engordar la cuenta de resultados, una vez caídos los créditos inmobiliarios, todo esto a costa del fruto y sacrificio de los impuestos a los ciudadanos, que somos siempre los damnificados por los errores de los políticos, que evitan su responsabilidad ya que forman parte de sus consejos de administración. Insaciables a la hora de crear impuestos ya que son los que gestionan nuestro dinero, y los que lo administran, con unos privilegios desmesurados, contratos blindados, o finiquitos desproporcionados... Algunos piensan que la política es una profesión en vez de un servicio a los ciudadanos, y que está para servirles a ellos, en vez de servirnos a nosotros.

Es increíble que teniendo toda esta información, y el dinero, nos dejemos manipular por las grandes corporaciones, sin hacerles frente, solo nos falta el corporativismo, y la unión, de una sociedad adormecida, que se limita a quejarse sin poner ningún medio para hacer frente a tanto despropósito y abuso.