El veterano piloto italiano Valentino Rossi, 38 años, compañero del norteamericano Nicky Hayden, cuyo fallecimiento ha sido anunciado este lunes por los médicos que le atendían en el hospital de Cesena donde había sido ingresado el pasado martes tras estrellarse contra el parabrisas de un automóvil, ha manifestado que "se trataba de un ser maravilloso, encantador, educadísimo y muy, muy, deportivo. En el 2006, Nicky me ganó el título, pero perder contra Hayden era un placer o, como mínimo, algo más dulce que ser derrotado por cualquier otro piloto".

"Es de los pilotos que podía caminar por el 'paddock' con la cabeza alta, pues nadie, nadie, dijo jamás una mala palabra de él", añade el también italiano Danilo Petrucci, que hoy empezará los entrenamientos privados de Ducati en el Circuit de Catalunya tras participar en el Gran Premio de Francia, ganado ayer por el catalánMaverick Viñales (Yamaha).

"La muerte de Nicky nos afecta a todos, pues él no era uno más", ha comentado Andrea Dovizioso (Ducati). "Nicky era un apasionado de las motos y muy amigo de sus amigos. Lo que le ocurrió a él nos puede pasar a cualquiera, pilotando a 300 por hora con nuestras motos, entrenándote en bici o pasando por debajo de un balcón".