Lejos de rebajar el clima de tensión que él mismo creó en Sepang, desde las declaraciones de la rueda de prensa del jueves hasta el momento del derribo de Marc Márquez, Valentino Rossi ha optado tras perder el título en la carrera defintiva de Cheste por ensuciar la victoria de Jorge Lorenzo.

"Jorge no tendría que estar tan contento", ha dicho el italiano, que ha acusado a Márquez de actuar como "guardaespaldas" del mallorquín. "Tras la carrera de Motegi tenía una ventaja importante, pero en Australia ya empezaron a suceder cosas extrañas. Márquez se dedicó a hacer de guardaespaldas de Lorenzo. Es algo que nunca había sucedido en este deporte, es decepcionante para MotoGP", ha soltado Rossi, obviando una vez más que en aquella carrera Márquez le arrebató el triunfo (y 5 valiosos puntos) a Jorge Lorenzo, que fue segundo.

"Es un sucísimo final para un campeonato que había sido muy bonito. Ha sido una gran desilusión", ha añadido Rossi, que solo ha concedido que "por lo fuerte que ha ido en la pista, Jorge es un justo campeón". Pero hasta ahí. Acto seguido ha añadido que este "no ha sido un campeonato verdadero porque no se ha decidido en la pista.

UNA FALTA DE RESPETO Y UN INSULTO

Poco antes, Márquez había lamentado los silbidos que, por primera vez en su carrera, había tenido que escuchar, y había manifestado su sensación de que la tensión, lejos de rebajarse, iría a más. El piloto de Cervera había recalcado que él siempre sale a ganar, y que le molesta que se ponga en duda: "Para un piloto ganador, que le acusen de dejarse ganar es una falta de respeto y un insulto. Siempre intentamos dar el 100% y salimos a ganar".

Lorenzo, sin conocer estas declaraciones, explicó después que llegó al final muy justo de gomas y que tenía la sensación de que tanto Márquez como Dani Pedrosa le habían respetado. "Ellos tenían bastante mas grip y seguramente el hecho de saber lo que me jugaba me ha ayudado. Al ser españoles como yo, quizá esta vez no han intentado un adelantamiento. A lo loco, Dani podría haber intentado pasarnos a Marc y a mí, pero somos españoles y este título tenía que quedarse en España, era lo justo".

UN PACTO INEXISTENTE

El flamante campeón enseguida ha rectificado y ha dicho que tendrán que ser los pilotos e Honda quienes expliquen su actuación, pero sí ha pedido al público "que, aparte de los colores de cada uno, respete a los demás pilotos". "Los fans de Valentino nos han silbado y nos han acusado de tener un pacto que nunca ha existido".