El profesor salesiano Luis de la Torre Bellido congregó el pasado domingo en la Basílica Pontificia de San Juan de Avila a centenares de montillanos deseosos de escuchar su exaltación de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.

Tras las palabras de bienvenida a cargo del presidente de la Agrupación de Cofradías, Miguel Bellido, se presentó la Coral Montillana de Antiguos Alumnos Salesianos que, bajo la dirección de José María Luque, ofreció un concierto de música sacra que contó con la colaboración de la soprano villarrense Concepción Martos.

A continuación, tomó el uso de la palabra Juan José de la Torre, hermano del pregonero y cofrade fundador de la Hermandad de la Juventud, a la que ambos han estado muy unidos desde siempre.

Durante su presentación, Juan José de la Torre ofreció un esbozo biográfico de su hermano, licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Córdoba y estudiante de Teología en el Instituto de Ciencias Religiosas San Agustín de la Universidad de Jaén. Una vez concluida la intervención del presentador, Luis de la Torre se dirigió a los presentes para compartir su particular visión de la Semana Mayor.

"Semana Santa es ver otra vez --como si fuera la primera- las salidas espectaculares, las buenas bandas; es contar nazarenos el Miércoles y ver a un barrio entero el Martes. Porque el Martes --espero que me perdonen-, el Barrio toma Montilla", dijo.

En los primeros compases de su intervención, plagada de referencias a la Hermandad de la Juventud, de la que es miembro activo, Luis de la Torre animó a instituciones y colectivos sociales a buscar juntos "todos los caminos posibles para que nuestra Semana Santa sea declarada Bien de Interés Turístico".

Tomando como hilo conductor el relato evangélico de los últimos días de Jesús, el pregonero fue esbozando con la palabra el retrato de cada una de las hermandades que conforman la Semana Santa de Montilla, empezando por la Entrada Triunfal en Jerusalén y concluyendo con el misterio de la Resurrección.

Al término del acto, Luis de la Torre recibió la insignia de oro de la Agrupación de Cofradías.