Adentrarse en pleno siglo XVII con unos anfitriones de excepción para disfrutar de un buen vino Montilla-Moriles, acompañados de la prosa del mismo Gómez Suárez de Figueroa. Esta fue la propuesta celebrada en la Casa del Inca impulsada por la Agencia Montur y la Librería Nobel, con el apoyo del Ayuntamiento.