Varias parcelas enclavadas en los términos municipales de Montemayor y Puente Genil, cultivadas de uva de la variedad moscatel, protagonizaron en la madrugada del pasado 25 de julio el inicio de la vendimia en la zona Montilla-Moriles, con casi dos semanas de adelanto con respecto a la campaña anterior, que arrancó el 6 de agosto.

"Vamos a tener una vendimia espléndida", apuntó el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles, Javier Martín, para quien "las circunstancias climatológicas son bastante favorables y las perspectivas, si seguimos insistiendo en la comercialización de nuestros vinos, son bastante óptimas".

Las altas temperaturas y la baja humedad llevaron a la uva al momento óptimo de su recolección, con un alto nivel de azúcares que, luego en bodega, serán transformados en grados de alcohol naturales. Tras las primeras variedades en vendimiarse, se recolectaron las variedades tintas y, finalmente, la uva pedro ximénez, autóctona del marco vitivinícola cordobés.

Tras la cosecha del pasado año, que alcanzó los 55 millones de kilos, la zona Montilla-Moriles espera contar este año en torno a un 20 por ciento menos de fruto, "pero de una magnífica calidad", tal y como subrayó el presidente del Consejo Regulador, quien hizo hincapié en que las uvas que comenzaron a recolectarse el 25 de julio "se convertirán en vino a finales de septiembre, siendo Montilla-Moriles la única Denominación de Origen que puede obrar este milagro".

El Consejo Regulador manifestó su deseo de que la vendimia 2014, que supone el comienzo de la recogida de uva en la práctica totalidad del territorio europeo, "llegue colmada de beneficios, con una producción de magnífica calidad para los agricultores y que pueda contribuir a elaborar vinos de calidad superior con los que poder competir en el mercado en las mejores condiciones y llegar a situar a Montilla-Moriles en el panorama vitivinícola mundial, como merece".

Con todo, la recolección de la uva se generalizó en el marco hace apenas unos días, confirmándose las estimaciones apuntadas semanas atrás por el Consejo Regulador. Así, los responsables de la cooperativa La Unión, la entidad que desarrolla la mayor vendimia de toda Andalucía, esperan procesar entre un 20 y un 30 por ciento menos de fruto que en la campaña anterior, coincidiendo así como las valoraciones del Consejo Regulador.

"La uva posee una muy buena calidad y un tamaño de grano apropiado, que determinará la intensidad aromática de los futuros vinos, así como un grado de madurez óptimo, una equilibrada acidez, y un aroma y un sabor intensos", destacó el enólogo de La Unión, José Garramiola. El técnico montillano se mostró convencido de que La Unión obtendrá este año un mosto "inmejorable" con el que elaborar el vino blanco joven Algarabía o los populares vinos de tinaja, que "cada año tienen más aceptación entre nuestros clientes, debido a su frescura, ligereza y grado alcohólico, más bajo que los habituales vinos finos de la zona".

El porcentaje de uva recolectada muy temprano es mayor cada año. Ello permite que la entrada del fruto en el lagar se registre a horas en las que el calor se acusa menos, lo que asegura la máxima calidad de la cosecha.

"Los aromas primarios de la uva, que son los que nos recuerdan a la variedad, permanecen a temperaturas bajas", detalló el enólogo de La Unión.