La realidad es tozuda y, en ocasiones, dista mucho de los deseos y de las previsiones más optimistas. Bien lo saben en la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles, donde la vendimia 2016 concluirá con una producción de uva blanca cercana a los 39 millones de kilos, muy por debajo de las expectativas que el sector se marcó al inicio de la campaña, allá por el 3 de agosto. El delegado territorial de Agricultura, Francisco Zurera, desveló que el último aforo de vendimia en el marco vitivinícola cordobés situaba en 37,8 millones de kilos la cantidad de uva recolectada de la variedad autóctona, la Pedro Ximénez, de modo que la campaña concluirá en torno a los 39 millones de kilos.