El Ayuntamiento se ha propuesto ahora resucitar la flota de bicicletas que la Junta destinó a la localidad allá por el año 2009, dentro de un programa pionero que se implantó solo en 17 municipios andaluces, «con una buena acogida en general, a excepción de Montilla», según llegó a reconocer la propia Agencia Andaluza de la Energía. Y es que los técnicos de la entidad comprobaron, no sin estupor, que un proyecto que había causado furor en ciudades como Jerez, Dos Hermanas o Antequera, era rechazado en esta bendita tierra y, además, era usado como recurrente arma arrojadiza en política. Han pasado nueve años de aquello y todavía hay vecinos que sostienen solemnemente que las bicicletas fueron la peor inversión que hizo nunca el Consistorio, a pesar de que el proyecto fue subvencionado íntegramente por la Junta y que de las arcas municipales no salió ni un solo euro. Pero, ¿qué más da? Montilla «is different».