La Plaza de la Aurora se convirtió de nuevo en lugar de encuentro para miles de montillanos y visitantes que cada uno de noviembre, desde hace 27 años, acuden a la llamada de la Centuria Romana Munda para disfrutar del gran ambiente que se genera en torno a su paella gigante, para la que se utilizaron 15 litros de aceite, 160 kilos de carne, otros 220 de arroz o 50 kilos de tomate.