La Feria en honor de San Francisco Solano, junto con las populares coplas de El Santo, forman ya parte del Patrimonio Inmaterial de Andalucía. El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), dependiente de la Consejería de Cultura, ha decidido incorporar las fiestas patronales de Montilla a su Sistema de Gestión e Información de los Bienes Culturales (Mosaico), una guía interactiva que pretende salvaguardar el patrimonio inmaterial andaluz. "Se trata de una gran noticia para Montilla porque, además de reconocer el arraigo y la importancia que nuestra Feria tiene para todos los montillanos, supone también un atractivo más para que muchas personas de fuera que no conocen nuestras fiestas patronales se acerquen en estos días hasta nuestra localidad", reconoció el alcalde, Rafael Llamas.

A mediados de julio, la localidad de la Campiña Sur conmemora la Feria en honor de San Francisco Solano, patrono de Montilla pero, también, de otras ciudades tan importantes como Lima, Potosí, Cartagena de Indias, Santiago de Chile o La Habana. Custodio de los toreros y Evangelizador de las Américas, la vida y obra del conocido como Taumaturgo del Nuevo Mundo está bien presente durante la solemne novena que, cada año, del 5 al 13 de julio, promueve la hermandad patronal.

Ya el 14 de julio, festividad de San Francisco Solano, el tradicional repique del campanillo sirve cada año para anunciar a los vecinos la salida procesional de El Santico, una pequeña talla que preside el retablo de la ermita de la calle Córdoba, levantada en 1821 por Alonso Delgado, gracias a las aportaciones del gremio de curtidores y zapateros.

Desde las 10.00 de la mañana, las calles Altillos, Ciprés o San Antonio viven su particular día grande, envueltas en las melodías de los cientos de fieles que acompañan la pequeña imagen del santo patrono. Coplas tradicionales que también han sido declaradas Patrimonio Inmaterial de Andalucía por parte de la Junta de Andalucía.

"Las letras están dedicadas a la advocación y no a una imagen en particular, por lo que suelen entonarse ante cualquier imagen de San Francisco Solano, aunque lo más habitual es escucharlas en el besapiés que tiene lugar en la ermita del Santico y en la procesión que se celebra la jornada siguiente", explica José Manuel Mejías en el Atlas del Patrimonio Inmaterial de Andalucía.

Tal y como recoge la Junta, las coplas del Santo relatan "algunos hechos de la vida cotidiana y de los milagros de San Francisco Solano", haciendo referencia particularmente a su vida en Montilla y a su relación con el barrio de Tenerías, donde se encuentra la ermita erigida a partir de un oratorio que El Santo visitaba en su niñez. "Las letras también ensalzan su virtudes y la devoción que por él sienten los vecinos de Montilla", señala José Manuel Mejías, quien añade que "estas coplillas se cantan con un ritmo suave y lento, repitiendo los versos, lo cual alarga considerablemente la duración de las piezas", que terminan con los versos "Viva Solano, que es el mejor de todos los montillanos".

"Dada la sencilla estructura de las coplas no es de extrañar que, cada poco tiempo, se compongan nuevas letras que pasan a sumarse a las ya existentes aunque, obviamente, muchas de ellas se han perdido", destaca el IAPH, que reconoce que el origen de las coplas es desconocido, si bien "algunos informantes las sitúan a finales del siglo XIX, pero sin aportar ningún dato que ratifique este argumento". Los investigadores del IAPH barajan como posibilidad que la procedencia de estas piezas musicales populares guarde relación con las coplas a la Virgen de la Aurora que se cantan a primeros de octubre.