Las cuatro fuerzas políticas que contarán con representación en el Ayuntamiento de Montilla durante el mandato que acaba de estrenarse esbozaron algunas de las líneas que marcarán su estrategia durante la solemne sesión de investidura que tuvo lugar el pasado sábado en el salón San Juan de Dios.

De este modo, y antes de que Rafael Llamas cerrara el Pleno extraordinario, tomaron la palabra los cabezas de lista del resto de formaciones políticas, mientras que por el PSOE hizo lo propio la edil Aurora Barbero.

Así, el andalucista Luis López aseguró que la prioridad de su grupo municipal será la reactivación económica de la localidad y defendió la idea de "conseguir una Montilla ilusionada, activa y atractiva, moderna en su imagen, en sus infraestructuras, en sus servicios, en su oferta sociocultural pero que, además, sea capaz de convivir con todo lo referente a su historia y a sus tradiciones".

Por su parte, Conchi Espejo insistió en que Izquierda Unida gestionará "con la mejor intención" los resultados derivados de las pasadas elecciones municipales del 24 de mayo, "velando porque sumen, o mejor porque multipliquen, las intenciones con las que nos presentamos".

En un emotivo discurso, la representante de IU también tuvo palabras de recuerdo para Antonio Carpio, indicando que "lejos de intentar ni siquiera emularlo, lo tendremos como referente que es para muchos en general y para nuestro equipo en particular".

En representación del Grupo Municipal Socialista, Aurora Barbero hizo hincapié en que la nueva configuración de la Corporación ha propiciado un cambio político que tiene su reflejo en un Gobierno municipal "estable y que va a llevar a cabo su tarea con un sólido y mayoritario respaldo". Para la portavoz del PSOE, los resultados de los pasados comicios "han dejado claro que el futuro de Montilla pasa por unir voluntades, consensuar proyectos, dialogar y ponernos de acuerdo para comenzar a resolver problemas y a hacer de Montilla una ciudad más próspera".

En último lugar, y justo antes de que cerrara la sesión Rafael Llamas, tomó la palabra Federico Cabello de Alba, quien anunció su intención de renunciar a su acta de concejal afirmando que "un exalcalde en la oposición frena más que ayuda a quien tiene que conseguir el progreso de nuestra ciudad". Tras hacer balance de sus cuatro años de mandato y reivindicar el resultado obtenido por el PP en las urnas, el ya exalcalde afirmó que sus concejales estarán en la oposición como consecuencia de "los acuerdos electorales de quienes, habiendo obtenido menor confianza, se arrogan la legitimidad de interpretar el voto de sus conciudadanos sumando sus votos, y sólo sus votos, porque sus políticas y sus programas ni sumaron nunca ni se presentaron unidos como una opción para los votantes".

Una vez concluidas las intervenciones, Rafael Llamas dio por cerrada la sesión, momento en el que un gran número de vecinos se acercó hasta el nuevo regidor y hasta los recién investidos concejales para desearles suerte en esta etapa que ahora comienza.