Los vecinos de Montilla han vuelto a hacer gala de su solidaridad, en esta ocasión hacia los más de 90.000 refugiados del Sáhara Occidental que, a finales del pasado mes de octubre, perdieron sus hogares como consecuencia de unas lluvias torrenciales que devastaron casi por completo los campos de Tinduf, Dajla, El Aiún o Esmara, en el sudoeste de Argelia, que quedaron total o parcialmente inundados.

El teniente de alcalde de Bienestar Social, Francisco Lucena, hizo entrega a Tomás Pedregal, representante de la Asociación Cordobesa de Amistad con los Niños y Niñas Saharauis (Acansa), de cinco toneladas de alimentos no perecederos y de ropa, así como de un cheque por valor de 600 euros, fruto de la campaña que el Consistorio inició el pasado 15 de diciembre y en la que se han implicado colectivos ciudadanos, clubes deportivos, empresas y vecinos a título individual.

"Se han cumplido nuestras mejores expectativas aunque debemos tener en cuenta que la ayuda nunca es suficiente", reconoció Francisco Lucena, quien no obstante se mostró "satisfecho" por haber podido cumplir los dos objetivos principales con los que se puso en marcha esta iniciativa. "Por un lado, era completamente imprescindible recoger alimentos y ropa, tras el desastre que sufrieron en los campamentos", indicó el edil montillano, quien explicó que el "segundo gran objetivo" de esta campaña era "buscar la raíz del problema" que sufre el pueblo saharaui desde 1975, tras la ocupación ilegal de su territorio por parte del Reino de Marruecos.

Lucena expresó el agradecimiento del Consistorio a las empresas y entidades que han colaborado.