La tercera etapa de Rafael Carrillo Falete al frente de la dirección técnica del Lucena no pudo comenzar mejor, por cuanto su equipo ganó contra todo pronóstico al líder de la categoría y virtual campeón del grupo IV de Segunda B, el Cádiz, en el tiempo de descuento. Por quinto año consecutivo, Falete salió victorioso en Lucena frente al conjunto de la Tacita de Plata, para lo cual puso en liza un equipo aguerrido, que mantuvo una gran intensidad durante los 95 minutos que duró el encuentro, a pesar de las bajas significativas de Sarmiento, Pepe Díaz y Hermosa. En los prolegómenos del encuentro, los jugadores del Lucena volvieron a protestar por su grave situación económica y se arrodillaron durante 30 segundos, lo que conllevó una fuerte pitada de la parroquia local a Javi Martí, el vicepresidente deportivo, quien, después de tres encuentros ausente, volvió a aparecer en el palco como único representante de la directiva celeste, dado que el presidente, Eduardo Bouzón, lleva más de dos meses sin dar señales de vida por el Estadio Ciudad de Lucena.

En el primer periodo, aún cuando los discípulos de Claudio Barragán dominaron territorialmente a los locales, tampoco inquietaron en exceso al guardameta Javi López, si bien el 0-1 fue una auténtica obra de arte de Hugo, quien engatilló un fuerte disparo en la frontal del área grande en el minuto 40, que entró como un auténtico obús en la escuadra izquierda de la portería del Lucena.

Antes habían avisado el ex cordobesista Airam Cabrera tras una buena triangulación con Mantecón y Migue García, así como el buen lateral izquierdo Tomás, en tanto que los lucentinistas tan solo disfrutaron de una ocasión que inició Sergio Albiol y que finalizó en gol Jony Lomas en el minuto 16, pero fue anulado por un claro fuera de juego.

SEGUNDA MITAD En la segunda mitad, Falete dejó en el vestuario al joven senegalés Abou y dio entrada al argentino Maxi Sepúlveda y su equipo tiró de orgullo, sometiendo totalmente en su terreno de juego al poderoso Cádiz hasta el punto de que a los cinco minutos de la reanudación ya debió establecer las tablas en el marcador en un córner botado por Sergio Torres a la izquierda de Ricky Alonso, que fue cabeceado al travesaño por el central Domingo. Esa acción dio a la plantilla celeste el punto de inflexión necesario para creerse que era posible la "hombrada" de batir al líder. No obstante, antes del empate a uno el Cádiz pudo sentenciar el duelo en un pase largo desde la línea medular de Hugo sobre Fran Machado, que se plantó ante Javi López, pero afortunadamente el cancerbero desbarataba el peligro de manera providencial.

EMPATE El 1-1 se gestaba en el minuto 68 merced a una falta sacada en el lateral derecho por Sergio Torres con mucha rosca, que ejecutó en gol Maxi Sepúlveda tras un mal despeje de un defensor cadista. Se producía el éxtasis entre la afición local, que a partir de ese momento llevó en volandas a su equipo hacia el triunfo.

En el tiempo de prolongación se fraguaba el definitivo 2-1 con un pase perfecto del pequeño Adri Ruiz, quien por cierto realizó su mejor actuación desde que llegó al Lucena en el pasado mercado invernal, que culminó en gol de vaselina Toni Conejo ante la media salida del portero visitante Ricky Alonso.

RUEDA DE PRENSA El entrenador del Lucena, Rafael Carrillo "Falete", sostuvo en su vuelta a la sala de prensa del Ciudad de Lucena que "en la primera parte tratamos de que hubiera un ritmo alto, que llegáramos a portería contraría para que el equipo cogiera confianza. Aguantamos los primeros 20 minutos, pero a raíz de ahí el Cádiz fue superior, con más posesión de balón y nos hizo daño con el gol. Sin embargo, en el descanso hicimos ver a los jugadores que podíamos hacerle daño al rival y en la segunda mitad mis jugadores se han sobrepuesto a la adversidad y han conseguido un partido disciplinado, serio y con mucha salida, con lo que incluso hemos sido superiores al Cádiz hasta en el aspecto físico".

Falete reconocía que "la jugada final del 2-1 era todo un premio para salir de una situación problemática y nos debe servir de orgullo por el trabajo y el compromiso de toda mi plantilla". Finalmente, el nuevo entrenador del Lucena soslayaba que para la salvación es "clave hacer del Ciudad de Lucena un auténtico fortín" y admitía que para alcanzar ese objetivo hará falta "llegar a los 44 o 45 puntos a tenor de los resultados de los rivales y los enfrentamientos directos de nuestros rivales. Antes de este partido pensaba que nos harían falta 7 puntos para salvarnos, pero ahora digo 9 como poco. Son muchos los equipos implicados, por lo que cada partido será una disputa máxima".