El Ayuntamiento, a través de la Policía Local, mantiene su campaña de control de limpieza en la vía pública. Pese a ello, determinados ciudadanos no parecen haberse enterado de esta campaña y mantienen su grado de incivismo, por lo que continúan vertiendo sus escombros y enseres donde les conviene o donde entienden están menos controlados por los miembros y cuerpos de seguridad. En zonas de segunda residencia de verano, poco iluminadas, como Los Poleares o Campo de Aras, los vecinos aprecian un crecimiento en los vertidos incontrolados de escombros , electrodomésticos, muebles y enseres ya en desuso y reclaman que se intensifiquen los controles. El concejal de Seguridad Ciudadana, Francisco Adame, insistía en que «se trata de una campaña preventiva que no busca el fin recaudatorio al imponer sanciones, sino llegar al fondo del problema, es decir, concienciar al ciudadano».