Los 200 cascos azules que partieron el domingo de Córdoba con destino al Líbano comenzaron ayer el relevo de las tropas españolas desplegadas al sur del país, en el marco de la Fuerza Interina de las Naciones Unidas (Finul). El contingente de la Brigada de Infantería Mecanizada Guzmán el Bueno X se trasladó desde el aeropuerto internacional Rafic Hariri de Beirut a la base Miguel de Cervantes, sede de la Brigada Este de la Finul, bajo mando español, donde permanecerá seis meses, informaron a Efe fuentes militares. Además, un total de 168 cascos azules destinados hasta ahora en el sur del Líbano regresaron a España en el mismo avión en el que viajaron sus relevos.

Se espera que un segundo grupo de la Brigada de Infantería Mecanizada Brimz X Guzmán el Bueno, con sede en Cerro Muriano y que estará dirigido por el coronel Aroldo Lazaro Saenz llegue en próximas fechas. Será la quinta vez que este contingente se despliegue al sur del río libanés Litani desde el 2006, año en que España comenzó su contribución a la Finul. El general Antonio Ruiz Olmos, jefe de la Brimz X, acudió el domingo al aeropuerto de Sevilla a despedir al primer grupo desplazado,

El contingente español está formado por unos 600 militares e incluye personal de otras unidades del Ejército de Tierra y de la Guardia Civil, así como 52 componentes del contingente de El Salvador, una compañía del Ejército serbio, dos militares mexicanos y batallones de India, Nepal e Indonesia. El relevo terminará con una ceremonia de transferencia de autoridad en la base Miguel de Cervantes.

La Finul tiene como misión apoyar a las Fuerzas Armadas libanesas para garantizar la estabilidad y seguridad en cumplimiento de la resolución 1701 de la ONU que puso fin a la guerra entre Israel y el grupo chií libanés Hizbulá.