Muy afectado, Jim Carrey (en la foto con barba), de 53 años, fue uno de los allegados que se sumó este sábado a portar el féretro de su exnovia Cathriona White, de 30 años, que se suicidó la pasada semana de una sobredosis de pastillas, en Los Ángeles, tras la ruptura con el actor estadounidense. El funeral se celebró en una iglesia de Cappawhite, en el condado natal de la joven, Tipperary, en Irlanda.