Desde que el servicio de emergencia médicas recibe la primera llamada advirtiendo del atropello múltiple en el puente de Londres, poco después de las diez de la noche,en concreto a las 22:07, hasta que la policía abate a tiros a los tres presuntos terroristas pasan tan solo 12 minutos.

Poco después, los medios de comunicación empiezan a dar cuenta de los testimonios de gente que presenció, bien en el puente o en el mercado de Borough, lo sucedido. "Ví como (la furgoneta) lanzaba a una persona varios metros por el aire y hasta donde pude ver, había unas cinco o seis personas tiradas en el suelo. Parecían muertas o que se estaban muriendo", explicó un joven llamado Mark. Otro testigo, Alessandro, describió como la furgoneta cruzaba el puente a gran velocidad "en zig zag intentando embestir al máximo de personas posibles".

Tras llevarse por delante a un número indeterminado de viandantes, la furgoneta sigue su marcha, deja atrás el puente, y se estampa contra la valla que rodea la catedral de Southwark, a orillas del Támesis, cerca del pub El Barrowboy & Banker. "Es un ataque terrorista, estoy seguro. La camioneta golpeó la baranda del puente de Londres y a continuación un hombre con un cuchillo y se dirigió a un bar", explicó a la agencia AFP Dee, un joven de 26 años.

Los terroristas salen del vehículo armados con grandes cuchillos y vestidos con unos chalecos que simulan cargar explosivos. Mientras caminan por la calle van acuchillando a todo persona que encuentran a su alcace.

MENSAJE DE URGENCIA

"Estábamos limpiando cuando dos personas entraron en el restaurante gritando y presas del pánico", explicó al diario 'The Guardian" Felipe Vaiano, empleado del restaurante Roast. "Al principio no sabía lo que estaba pasando y qué hacer. Ellos intentaron explicarme lo que estaba sucediendo, pero el pánico les impedía casi hablar. Lo único que atinaban a decir era que abajo estaban apuñalando a gente. Rápidamente cerramos las puertas del restaurante y nos quedamos dentro como una hora".

Una de las personas que se encontraba en un bar, en el momento del ataque, explicó como dentro del local la gente corrió hacia la salida de emergencia después de que sonara la alarma. "La gente empezó a gritar. En la esquina había un chico con una herida en el cuello. En el pub había una doctora que le ayudó, presionando la herida", recordó. Algunos testigos dijeron que para defenderse de los atacantes, la gente les lanzó mesas y sillas.

Las fuerzas de seguridad llegan rápidamente al lugar de los hechos y frente al Wheatsheaf, un pub que data del siglo XIX, abate a los tres terroristas y comprueba que los chalecos con explosivos son falsos. Son las 22:16 horas de la noche.

Una hora y media después la policía emite un mensaje de urgencia en el que pide a los londinenses que se mentengan en un lugar seguro, coloquen sus teléfonos móviles en el modo silencio y que llamen a la policía si ven que su vida corre peligro. Es la primera vez que las autoridades difunden este tipo de mensaje.