"Yo creo que lo que hemos visto en Barcelona es una batalla que debemos dar entre todos". Así se ha referido el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, en la rueda de prensa durante la minicumbre en París. En ella ha anunciado una reunión con los ministros de Interior del llamado G-6 (España, Francia, Alemania, Italia, Polonia y Reino Unido) en octubre en Madrid, en un intento de forjar un compromiso para facilitar la cooperación en la lucha contra el terrorismo y en el ámbito de la inmigración. Rajoy ha declarado que "la lucha contra el terrorismo es un tema capital" y que "es fundamental la estrecha colaboración internacional". El jefe del Gobierno también ha hecho mención de la importancia de la lucha contra la radicalización y la financiación del terrorismo.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, la canciller alemana, Angela Merkel, el primer ministro de Italia, Paoli Gentiloni, y la Alta Representante de Política Exterior y Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, han trasladado este lunes al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sus condolencias por los atentados terroristas perpetrados en Barcelona y Cambrils.

Los dos principales de esta reunión son la gestión de los flujos migratorios y el terrorismo. En relación a la cuestión de los refugiados, Macron ha reiterado que el plan de acción es atacar a las redes de traficantes ilegales y que el control de las aguas es una prioridad. "Humanidad y solidaridad" son los valores que rigen las líneas maestras de la minicumbre de este lunes, ha declarado el presidente francés. Asimismo, la canciller alemana, Angela Merkel, ha asegurado que "en África nunca vamos a poder resolver el tema de la inmigración".

Pobreza y desempleo, causas del drama en el Mediterráneo

Idriss Déby, presidente de Chad, ha declarado en la rueda de prensa que "hay que encontrar respuestas definitivas" a esta situación. "Todos nos hemos comprometido a reducir esos muertos africanos en el Mediterráneo". Se ha referido a la pobreza y al desempleo como las cuestiones que se tienen que tratar "al más alto nivel" para poder reducir los flujos migratorios.

Paolo Gentiloni, primer ministro de Italia, ha declarado que "no vamos a renunciar a salvar vidas humanas" pero que trabajará para que estos flujos "estén más controlados". También el primer ministro de Níger, Issoufou Mahamadou, ha manifestado que es intolerable que "miles de africanos mueran en el Mediterráneo" y ha remarcado la importancia de mejorar la gestión de los demandantes de asilo.

El presidente español se ha referido al tema de la inmigración irregular como una cuestión que "tiene consecuencias y ninguna buena".