Las autoridades ucranianas han reconocido de facto la independencia de los territorios controlados por las milicias prorrusas en el este del país al concederles un estatus especial, ha dicho este lunes el líder de la autoproclamada República Popular de Lugansk, Ígor Plotnitski.

"Pueden llamarlo estatus especial, pero si en la región no se aplican las leyes de Ucrania, se trata de hecho del reconocimiento de nuestra independencia, aunque con otras palabras, de una forma velada", ha dicho Plotnitski a los periodistas.

Mientras, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, ha justificado la concesión del estatus especial al territorio controlado por los prorrusos -equivalente a un tercio de las regiones de Donetsk y Lugansk- por la necesidad de salvaguardar el apoyo de la comunidad internacional a Kiev.

"Uno de los posibles escenarios que se barajaba si no aprobábamos esas leyes era cargar sobre Ucrania la responsabilidad de quebrantar el proceso de paz", aseguró el mandatario ucraniano en una entrevista emitida anoche por varios canales de televisión ucranianos.

AMPLIAS COMPETENCIAS

Aprobado por el Parlamento ucraniano el pasado martes mediante voto secreto, el estatus especial para las zonas que controlan a día de hoy los rebeldes concede a esos territorios amplias competencias que van desde la formación de sus propias fuerzas policiales y órganos judiciales hasta la posibilidad de establecer relaciones económicas con la vecina Rusia.

Sin embargo, el presidente de la Rada Suprema (Parlamento ucraniano), Alexandr Turchínov, ha recordado que el estatus especial no entrará en vigor hasta que no se delimiten con claridad las fronteras de los territorios que se beneficiarán del autogobierno.

"Hasta que la Rada no tome esa decisión (sobre las zonas con estatus especial), la ley no puede ser implementada aunque sea firmada por el presidente del Parlamento y promulgada por el presidente" de Ucrania, ha subrayado Turchínov en declaraciones al canal de televisión "1+1".

Por otro lado, el jefe del Parlamento y uno de los líderes del recién creado partido "Frente Popular", abiertamente opuesto a hacer concesiones a los separatistas, ha dicho que el estatus especial debería ser revocado si los rebeldes no cumplen con todas las iniciativas de paz de Poroshenko, incluidas las condiciones contempladas en la ley de amnistía aprobada también el pasado martes.

Esa ley otorga el perdón a los milicianos que no hayan cometido crímenes graves, como el derribo en julio del avión de Malaysia Airlines con 298 personas a bordo, pero a condición de que depongan las armas en el plazo de un mes, liberen a todos los rehenes y desalojen los edificios administrativos.

"Si las iniciativas de paz del presidente no reciben apoyo ni son llevadas a cabo (por los rebeldes), la ley debería ser inmediatamente revocada, en mi opinión", subrayó Turchínov.