A muchos viajeros europeos les han pillado por sorpresa los nuevos controles fronterizos en el espacio Schengen, que entraron en vigor oficialmente el 7 de abril, y que estos días de Semana Santa, de mayor afluencia de viajes, está ocasionado largas colas en los aeropuertos de la Unión Europea.

La reforma del Código de Fronteras de Schengen forma parte de las medidas tomadas por la UE en su lucha contra el terrorismo yihadista, que en los últimos tiempos ha golpeado duramente el continente. Las principales novedades afectan a los controles sobre losciudadanos de la Unión Europea (UE) y a los controles desalida para todos los viajeros. En concreto, en el caso de los ciudadanos de la UE, se pasa a comprobar sistemáticamente susdocumentos de viaje cuando entren o salgan del territorio Schengen mediante la consulta de las bases de datos pertinentes.

Ello está suponiendo que el paso de los viajeros por los controles de seguridad se está ralentizando y, en consecuencia, se estan produciendo largas colas. Los agentes comprueban y autentifican todas las identificaciones de los pasajeros.

Las autoridades españolas ya eran conscientes de las molestias que este cambio puede ocasionar y, en previsión, el Ministerio del Interior anunció, el pasado 7 de abril, que había tomado "las medidas oportunas para reducir las molestias que pueda ocasionar la intensificación de estos nuevos controles a través de la instalación de nuevos sistemas tecnológicos y el refuerzo de personal en los puntos de mayor intensidad de paso". Medidas que, a la vista de los hechos, han resultado insuficientes.

Para agilizar el proceso, Interior recomienda a los ciudadanos de la Unión Europea que necesiten entrar o salir de los países del espacio Schengen a través de puestos fronterizos españoles, que viajen siempre provistos de pasaporte biométrico o, en el caso de los españoles, del DNI electrónico. Esto les permitirá hacer uso de los pasos automatizados ABC instalados en diversos puestos fronterizos aéreos, marítimos y terrestres como, por ejemplo, en los aeropuertos de Madrid, Barcelona, Girona, Palma de Mallorca, Alicante y Málaga así como en el puerto de Algeciras o en el puesto de control de La Línea de la Concepción.