Los habitantes evacuados de Amatrice, en el centro de Italia, se preparan para pasar la segunda noche en campamentos habilitados después de perder sus casas por el terremoto devastador que sacudió ayer miércoles la región.

Es el caso de Giulia Vizzoni, que en el momento del seísmo se encontraba en casa con su marido, su hija, su yerno y sus dos nietas.

Ya la pasada noche ella y su familia durmieron en el primer campamento con capacidad para 350 personas que se instaló para asistir a los damnificados.

"Hemos dormido en el suelo, había mantas pero... veremos qué tal pasamos esta noche", comentó a Efe.

Vizzoni relató que ninguno de los miembros de su familia ha sufrido heridas, pero confirmó que su casa es una de las derruidas tras el terremoto.

"Afortunadamente a ninguno nos ha pasado nada, pero estamos sin casa. ¿Cómo vamos a pasar el invierno?", se preguntó preocupada.

Explicó que Amatrice es un pueblo pequeño -tiene unos 2.000 habitantes- y que en él todos se conocían.

"Hemos perdido a tantos amigos. Esta es una localidad pequeña, nos conocíamos todos aquí", dijo, visiblemente afectada.

Recordó que es la segunda vez que el centro de Italia tiembla en siete años aunque consideró que este terremoto es "mucho más tremendo" que el de L'Aquila en el 2009, en el que murieron 300 personas.

El dolor y la desesperación se refleja en el rostro de Vizzoni cuando confiesa que su nieta le pregunta a diario si algún conocido "ha muerto".

"Tenemos que intentar irnos de aquí, ella nos oye hablar... y pregunta", lamentó.

Como ella, cientos de personas se preparan ya para dormir en distintos campamentos instalados por Protección Civil.

Hasta esta tarde solo se había habilitado uno con capacidad para 350 personas.

Unas mil personas, la mitad de la población de Amatrice, fueron desalojadas en las primeras horas tras el seísmo, que azotó esta zona montañosa de Italia al norte de Roma a las 3.36 horas locales (1.36 GMT) del miércoles.

El resto de evacuados que no pudieron dormir en el campamento ha pasado la noche en casas de parientes o en coches y tiendas de campañas propias.

Pero hoy se han instalado otros dos campamentos más en zonas cercanas que no han sufrido daños severos.

Uno de ellos está operativo en una zona cercana y lleva el nombre de Friuli Venezia Giulia (región del noreste de Italia) y un segundo es de la asociación italiana de voluntarios AMPAS.

Los dos tienen capacidad para 300 personas cada uno.

Hacia las 19.30 horas locales (17.30 GMT), autobuses de las autoridades italianas se han acercado hasta Amatrice para trasladar a las personas a los respectivos campamentos.

Una vez allí, son identificados y ubicados en las distintas tiendas de campaña disponibles, explicó un miembro de Protección Civil que prefirió permanecer en el anonimato.

En los campamentos hay centros temporales de asistencia médica y psicológica, farmacias y también personas que ofrecen comida, agua y mantas a los afectados.

Hasta hoy, a este pequeño municipio de la provincia de Rieti se han trasladado ciudadanos voluntarios con la atención de ayudar.

Pero, ya desde mañana, Protección Civil ha pedido que abandonen la zona para dejar trabajar con mayor intensidad a los equipos de rescate.

Mientras tanto, los efectivos desplegados continuarán durante la noche con las labores de búsqueda de posibles supervivientes, porque aún se teme que haya cientos de desaparecidos bajo los cascotes.

Amatrice es uno de los municipios más afectados por el seísmo.

En los diversos puntos del centro de Italia que han sufrido daños por el terremoto han muerto unas 250 personas, según datos oficiales.

Solo en Amatrice han muerto según las últimas informaciones de Protección Civil 193 personas.