Jean Marie Le Pen le ha ganado en los tribunales una primera batalla a su hija Marine. La justicia francesa ha declarado este jueves nula la suspensión de militancia del fundador del Frente Nacional decidida por el Comité político del partido el pasado 4 de mayo a instancias de su presidenta.

El Tribunal de Gran Instancia de Nanterre, que ha alegado un defecto de forma, ha indicado que Jean Marie Le Pen tendrá que recuperar sus derechos vinculados a su condición de militante y, en su caso, al de presidente honorario.

La formación ultraderechista ha adelantado que recurrirá el fallo y su dirección ha restado trascendencia a la noticia que, no obstante, ha sido toda una sorpresa. “En cualquier caso, este juicio sólo tendrá un efecto: permitir a Jean Marie Le Pen votar en el Congreso del próximo 10 de julio”, ha indicado el FN en un comunicado.

Cambio de estatutos

En la misma línea, el vicepresidente del partido, Florian Philippot, ha dicho en la televisión BFM que la decisión judicial “no cambia gran cosa”. El Frente Nacional someterá al voto de los militantes durante un Congreso extraordinario los nuevos estatutos del partido que prevén eliminar el cargo de presidente honorario.

Se quiere así despojar al viejo Le Pen de este derecho después de unas polémicas declaraciones en una revista ultra rehabilitando la figura política del colaboracionista Pétain o reiterando que las cámaras de gas fueron un “detalle” de la Historia.

“Nadie piensa ni por un segundo que Jean Marie Le Pen habla en nombre del Frente Nacional, dado que él mismo ha dicho que deseaba el fracaso del Frente Nacional y que repudiaba a su propia hija”, ha continuado Philippot.

Jean Marie Le Pen, por su parte, ha reaccionado en su cuenta de Twitter.“La increíble expulsión de la que he sido víctima, anulada. Espero que ahora avancemos más rápido hacia la unión. A trabajar!”.