El Gobierno griego ha tratado este lunes detranquilizar a los acreedores e inversores, que temen que se quede sin liquidez, y ha asegurado que este mes puede cubrir sus necesidades,incluyendo la devolución al Fondo Monetario Internacional (FMI) de un préstamo de 1.500 millones de euros.

«El Gobierno está explorando soluciones para asegurar que no habrá ningún problema para devolver el préstamo del FMI y cubrir las obligaciones de financiación de marzo» afirmó el portavoz del Ejecutivo, Gabriel Sakellaridis. Por su parte, el ministro de Sanidad, Panayotis Kurumblís, salió al paso de un rumor recogido por los medios de comunicación que anunciaba una reducción del 50% en el presupuesto de los hospitales debido a la falta de liquidez. «No hemos recortado ni un euro», afirmó Kurumblís.

Sin embargo, existen motivos de preocupación. En marzovencen pagos por valor de 7.270 millones de euros, y las arcas públicas -que en enero recaudaron 935 millones de euros menos de lo esperado- se enfrentan a un problema de liquidez en un momento en que Grecia afronta pagos de 1.500 millones de euros en salarios y pensiones. Una parte de los vencimientos corresponden a letras del tesoro, y se podrían financiar con más emisiones, pero no la devolución del crédito del FMI. Y, a pesar de la extensión de cuatro meses del acuerdo de préstamo, Grecia no recibirá de sus socios europeos las cantidades pendientes hasta que no se complete la evaluación de las reformas prometidas. Fuentes del Ministerio de Finanzas señalaron ayer a la prensa griega que existen «alternativas» de financiación, sin especificar cuáles.

LA SALIDA

El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, pareció ofrecer una salida. En una entrevista al 'Financial Times', afirmó que Grecia podría recibir este mismo mes una parte de los 7.200 millones de euros pendientes del último tramo del rescate si Atenas empieza a poner en marcha las reformas.

Mientras, el ministro de Economía español, Luis de Guindos, ha afirmado ayer en Pamplona que los países de la zona euro ya hablan de un tercer rescate para Grecia y lo ha cifrado entre 30.000 y 50.000 millones de euros «de los cuales el 13% correspondería a España». Guindos ha recibido poco después un contundente desmentido del jefe del Eurogrupo. «Los ministros de Finanzas de la zona euro no han discutido ningún tercer rescate», dijo Simone Boitelle, la portavoz de Dijsselbloem. El primer ministro griego, Alexis Tsipras, había reiterado el viernes que Grecia no precisaría un tercer rescate. Fuentes del Ministerio de Economía español precisaron que Guindos «solo había hecho una estimación sobre el coste de un hipotético tercer programa».

La introducción en el Parlamento griego de algunas de las medidas sociales anunciadas por Tsipras fue ayer retrasada. Entre estos proyectos estaba la ampliación de los plazos para que particulares y pequeñas y medianas empresas subsanen sus deudas con las arcas públicas, y la prohibición de los desahucios de primera vivienda. El jueves se tratará de la recontratación de los empleados de la televisión pública ERT, clausurada en 2013.

El paquete estrella del programa social del nuevo Gobierno se introducirá este martes en la Cámara. El plan incluye la reconexión de la electricidad para 300.000 hogares por debajo del umbral de la pobreza. Además, un número similar de familias recibirá cupones canjeables por alimentos y otros bienes de primera necesidad. El tercer pilar del paquete prevé subvencionar los alquileres de 30.000 personas en riesgo de quedar sin techo. Otras medidas prometidas, como atención médica gratuita no se contemplan todavía.