La 'exspice' Mel B no puede supuestamente hacer frente a las demandas económicas de exmarido Stephen Belafonte debido a que gran parte de su fortuna ha sido dilapidada en gastos extravagantes. Según ha revelado en sede judicial su abogada Jacalyn Davis, la cantante habría gastado parte de su patrimonio, valorado en 38 millones de libras (casi 44 millones de euros), en caprichos ostentosos, como una isla privada en Virginia que la ex-Spice Girl regaló a su expareja como regalo de cumpleaños.

Ahora Belafonte le reclama una pensión mínima de 11.000 dólares al mes (más de 9.600 euros), entre los que se desglosan 4.000 para comida, 2.000 para ropa o 750 para el teléfono móvil, según recoge la revista norteamericana TMZ. La letrada de la jueza de 'America's Got Talent' ha señalado que durante los 10 años de relación la pareja nunca tuvo dinero para hacer frente a los impuestos a finales de año y que todo lo ganado por Mel en el popular grupo británico se puso en las cuentas conjuntas del matrimonio.

COCHES Y JOYAS DE LUJO

Sin embargo, todo ese dinero se invirtió en caprichos prohibitivos, como un millón de libras en coches de lujo (casi 1,4 millones de euros), en un Bentley Continental GTC, un Ferrari California, un Cadillac Escalade ESV, un Range Rover blindado y un Mercedes Benz S-Class. También hay varias piezas de joyería, como varios anillos de diamantes, dos brazaletes de Cartier Love y un Rolex; además de una colección de bolsos, los gastos de la escuela privada en Beverly Hills a la que acuden sus hijos, y el cuarto de millón que invierte al año en un publicista, una niñera y el resto del servicio que atiende sus residencias.

El productor, al que Mel habría acusado de maltrato, reclama una valiosa manutención basándose en los ingresos actuales de la cantante de 42 años gracias a su contrato en el programa televisivo, por el que estaría recibiendo entre 220.000 y 250.000 libras al mes (entre 250 y 285.000 euros). Hay que señalar que la estrella británica sostiene desde hace años la pensión alimenticia de su primer marido Jimmy Gulzar, el bailarín del que se separó en el 2000 y con el que tiene una hija en común, Phoenix.