La actriz Jennifer Lawrence ha resultado ilesa tras el fallo en los motores que sufrió su avión privado el pasado sábado. El incidente provocó un aterrizaje de emergencia cuando la protagonista de 'Los juegos del hambre', de 26 años, volvía de visitar la residencia familiar de sus padres en Louisville (Kentucky).

Los motores del avión comenzaron a fallar a la altura de Buffalo (Nueva York) y uno de ellos llegó a pararse. Cuando comenzó el aterrizaje forzoso y antes de llegar a tierra, el segundo motor también se paró. Aún así, gracias a la experiencia de la tripulación y a su rápida actuación, consiguieron tomar tierra firme sin más contratiempos.

El avión fue recibido por los vehículos de emergencia en el aeropuerto de Buffalo. La prensa estadounidense asegura que ni la actriz ni la tripulación sufrieron ningún daño y que, finalmente, todo quedó en un susto para la ganadora del Oscar por 'El lado bueno de las cosas'.