El Barcelona se lleva una mínima ventaja a Mestalla después de derrotar por un gol de Luis Suárez (1-0) a un Valencia muy defensivo, que en el segundo tiempo se estiró pero sin fortuna, aunque tuvo un ocasión inmejorable en el minuto 89. Un Barça dominante y abusivo con el balón intentó ante un conservador Valencia llevar el peso del partido y traducirlo en goles, pero acabó haciéndole cosquillas, ya que en los primeros 45 minutos Jaume Doménech vivió en su área sin excesivos peligro.

El partido tenía una dinámica clara desde el primer minuto: el balón iba a ser del Barça y los espacios del Valencia. El equipo de Marcelino García Toral lo fió todo a cerrar los pasillos interiores y a que el cuarteto formado por Andreas, Parejo, Coquelin y Soler impidiesen en el centro del campo que su rival no se sintiese cómodo. Y lo logró. El momento más incisivo del Barcelona en la primera mitad llegó en el minuto 39, en una acción que acabó con un centro envenenado de Jordi Alba, cuyo balón se paseó por delante de la meta y con Luis Suárez echándose al suelo para desviarlo a gol, sin acierto.

Tras el descanso, el Valencia salió más descarado en el segundo tiempo y tras una primera parte echado atrás, en este acto dio un paso adelante, aunque la primera acción de gol la elaboró el Barcelona, en los pies de Messi, quien tras hacer un eslalon hacia la izquierda su duro disparo acabó en el lateral de la meta visitante.

El partido estaba para el que más pausa tuviese, ya que se había entrado en una fase de dominio alterno, y el balón llegó a Messi, quién se lo echó hasta la línea de fondo y se lo envió a un Suárez que, en el otro palo y después de que Jaume lo rozase, conectó un certero remate de cabeza (1-0, minuto 67). El Valencia pudo empatar al final por medio de Santi Mina.