La plantilla del Sevilla se encuentra ya concentrada en la final de la Copa del Rey que disputará el próximo sábado en Madrid ante el Barcelona, y lo hace en Marbella (Málaga) para alejarse del bullicio que se vive estos días en la capital andaluza con motivo de la Feria de Abril.

El entrenador del equipo, el italiano Vincenzo Montella, tras el empate a cero que firmó el martes en el estadio Riazor ante el Deportivo en la trigésima tercera jornada de LaLiga Santander, se desplazó por la noche con los suyos directamente desde La Coruña a Málaga para alojarse después en Marbella y preparar la final.

En la planificación se contempla el que el viernes la expedición se desplace directamente desde Málaga a Madrid y que no regrese a Sevilla hasta después de la disputa del choque con el Barcelona, informó el club.

En Marbella están 24 futbolistas, todos los disponibles para la cita, incluidos los dos delanteros que estaban con algunos problemas físicos, el colombiano Luis Muriel y Sandro Ramírez, quienes ya pudieron participar en el partido ante el Deportivo.

Se quedó en Sevilla, al no entrar en los planes de Montella desde que se hizo cargo del equipo el pasado diciembre, el centrocampista brasileño Paulo Henrique Ganso, además del central danés Simon Kjaer, único lesionado en la actualidad.

Tras la sesión matinal del próximo viernes en Marbella, la expedición se desplazará a Madrid para la rueda de prensa oficial de la final que ofrecerá Montella y un jugador, fijada en el estadio Wanda Metropolitano para ese día a las 19.30 horas.

Mientras, en Sevilla, con todas las entradas vendidas que la Federación Española le facilitó al club andaluz, se preparan los viajes hacia Madrid.

La animación entre los aficionados sevillistas es total, como lo demuestra el hecho de que se han formado grandes colas en las tiendas que el club tiene en el centro de la ciudad y en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán para adquirir la camiseta que lucirá el equipo en la final.