Graves incidentes con insultos racistas en un partido de Preferente. Según informó ayer el diario asturiano La Nueva España, el trío arbitral que dirigió el partido Ribadedeva-Nalón (1-1), de la regional asturiana, sufrió insultos racistas y sexistas por parte de aficionados presentes en el campo de la Peña. Asnake Wolde, árbitro negro de la Delegación de Gijón, y sus dos asistentes, Sonia Güeva Rodríguez y Aser Fernández Merayo, pasaron un «auténtico infierno desde el minuto uno», según varios testigos. Asímismo, los incidentes constan en el acta arbitral.

Según el colegiado, los insultados llegaron por parte de un grupo de aficionados que lo llamaron «negro de mierda, qué puta pena que no se te pinchó la patera, puto negro de mierda, hijo de la gran puta», entre otros insultos. Aunque hubo más según la propia acta del partido: «Te debió de joder la vista el salitre de la patera, negro de mierda, debes de pitar tan mal por la mierda de raza, puto negro».

Insultos sexistas

El árbitro Asnake Wolde también escribió en el acta insultos hacia sus dos asistentes donde figuran desconsideraciones sexista hacia su ayudante Sonia Güeva. «Mira a las bandas, hostia, que no sacan ni una bien. A ver, nena, nena, espabílate de una puta vez (...) Qué coño haces, vete a tu casa, subnormal, estabas mejor fregando en tu casa». A la asistente también la trataron de prostituta.

El otro asistente, según el árbitro titular, recibió diversas amenazas. «Me cago en tus putos muertos hijo de la gran puta, te vamos a arrancar la puta cabeza, me cago en el coño de tu puta madre». Según la información los insultos se escucharon desde diversas zonas del campo y fueron constantes a lo largo del partido.

Reacción e investigación

La AD Ribadedeva mostró ayer su repulsa por los insultos racistas y machistas denunciados en el acta del partido. El club, al mismo tiempo, pidió disculpas al trío arbitral amenazado y se ha comprometido a identificar y expulsar de la entidad a los autores.

La directiva del club asturiano, que confesó sentirse «sumamente apenada» por lo acontecido, puntualizó que «el machismo y el racismo no tienen cabida» en su club. Por otra parte, la entidad argumentó que esta misma temporada hay un jugador negro en sus filas y varias mujeres con «cargos relevantes» en el club, en los puestos de «tesorera y secretaria, a la par que varias vocales».

Además, el club señaló que «ningún directivo fue consciente» de los insultos denunciados en el acta por Asnake Wolde. Por último, el Ribadedeva adoptó el compromiso de que «trataran de identificar» a quien protagonizó estos hechos para expulsarlo, si es socio, o prohibirle la entrada al campo, si es simpatizante.