No empezó mal el camino de España hacia Rusia. Queda más de medio año para que se inaugure la gran cita del fútbol, que comenzará el 14 de junio en Moscú, pero el sorteo es esperanzador. La campeona del 2010 no era cabeza de serie y existían temores, pero la fortuna acompañó. Los hombres de Julen Lopetegui debutarán contra la Portugal de Cristiano Ronaldo, actual campeona de Europa, pero después se medirán con dos rivales inferiores: la rocosa Irán de Carlos Queiroz, el extécnico del Madrid, y Marruecos, que dejó fuera del torneo a Costa Marfil.

La ruleta rusa del sorteo celebrado en el Kremlin podría deparar múltiples combinaciones. Poco tiene que ver el grupo que le tocó a la Roja con una posible combinación con Brasil, Dinamarca y Nigeria, por citar un ejemplo. Diego Armando Maradona, con una pajarita amarilla muy peculiar y una voz ciertamente pastosa, fue el encargado de sacar de la urna la bola de España. Gordon Banks, el mítico portero de la Inglaterra campeona en 1966, la ubicó en el grupo B. Allí ya se encontraba Portugal, que se coronó en la final de la Eurocopa ante Francia del año pasado. Será el único escollo destacable en un primer tramo de campeonato que no debería ser muy convulso.

MEJOR QUE EN BRASIL / El técnico español se mantuvo impasible al conocer su primer rival, mientras su homólogo luso, Fernando Santos, ponía peor cara. La Roja era la selección más fuerte del segundo bombo. Aunque Gary Lineker, el maestro de ceremonias, calificó a la campeona europea como el «el premio gordo» del sorteo, es un rival por debajo de Brasil, Alemania, Francia y Argentina, favoritas al título junto a España.

El estreno tendrá lugar el 15 de junio en Sochi, una localidad del sur cercana a Krasnodar, donde se concentrará España. Luego vendrán los duelos contra Irán en Kazán y Marruecos en Kaliningrado. Se trata, sin duda, de un grupo más sencillo que el del pasado Mundial, cuando la campeona de Sudáfrica fracasó en Brasil ante Holanda, Chile y Australia. Las dos primeras, ausentes en la cita de Rusia, enviaron a la calle a un conjunto que ha recuperado la ilusión y la autoestima con la renovación impulsada por Lopetegui.

Los números también están con España, que eliminó a Portugal en sus dos últimos enfrentamientos: los octavos de final del Mundial del 2010 y las semifinales de la Eurocopa del 2012, selladas con el penalti a lo Panenka de Sergio Ramos. «Los datos no te sirven para ganar partidos, no vale de nada eso. Es un grupo difícil», dijo el seleccionador, que destacó los puntos fuertes de sus rivales: «Portugal es la campeona de Europa, no hace falta decir más; Marruecos tiene a la mayoría de sus jugadores en ligas importantes de Europa y dejó fuera a Costa de Marfil; Irán fue la primera selección en clasificarse para el Mundial sin encajar ni un gol», alertó.

Vicente del Bosque, ya liberado de su clásica prudencia, se mostró optimista con el grupo. «No nos podemos quejar, aunque tampoco hay que crear un optimismo exagerado. Tenemos una selección que transmite confianza y estamos entre los candidato al título», comentó el exseleccionador. Otro campeón del mundo, Carles Puyol, también destacó la fortuna en el sorteo. «Es un buen grupo. El primer partido contra Portugal será clave», dijo el central, que fue uno de los invitados a la gala.

Tampoco parece malo el cruce de octavos, ya que España se enfrentaría si se cumple la lógica a Rusia o a la Uruguay de Luis Suárez. Las cosas se complicarían, lógicamente, a partir de cuartos. En esa ronda la Roja se mediría contra la Argentina de Messi si ambas son primera de grupo. Luego podrían venir Alemania, la vigente campeona, en semifinales y la Brasil de Neymar en la final. Pero eso ya son profecías. Todo empezará en Sochi contra Portugal. «Naturalmente, España es uno de los favoritos para alzar la Copa. No es la primera vez que lo digo», remarcó el seleccionador luso.