Un árbitro de la liga francesa ha conmocionado a los aficionados del fútbol de todo el mundo con una reacción surrealista. En una acción del Nantes-PSG, el colegiado corría a todo gas detrás de una jugada. Entonces se cruzó frente a un defensor brasileño del Nantes y cayó sobre el césped. Pareció un resbalón. O un toque en carrera involuntario. Pero de forma instintiva, Tony Chapron, que así se llama el árbitro, dio desde el suelo una patada al jugador, Diego Carlos, que se quedó petrificado. Y no solo eso. Al levantarse, le enseñó la segunda tarjeta amarilla y le expulsó. Nadie daba crédito.

Ha sido sin duda la imagen de la jornada en la Ligue 1, difícil de superar. Cuando se produjo esta extraña situación, el Paris Saint-Germain ya aventajaba a su contricante gracias a un gol de DiMaria en el minuto 12. Chapron, además, pitó falta a favor de los parisinos. Lanzada por Dani Alves, el balón terminó en posesión de Rabiot, que casi anota el 2-0. El balón se estrelló en el poste.

El equipo de Unai Emery, ya con un hombre más, protegió el resultado y logró llevarse la victoria pese a jugar sin su estrella Neymar. Ahora falta ver la sanción que le cae al colegiado. No debería ser leve.