La 'sily seasson' de rumores sobre los pilotos de F-1 solía comenzar en estas fechas y finalizar en octubre. Pero los comentarios y suposiciones sobre fichajes y cambios de equipo arrancaron esta vez en la pretemporada de Barcelona y puede que finalice antes de las vacaciones en agosto. Y lo hará sin apenas cambios respecto a la parrilla de esta temporada. En realidad, ya solo quedan dos incógnitas por despejar. La primera es si Ferrari se atreverá a sustituir a Kimi Raikkonen por Charles Leclerc. La segunda es si Fernando Alonso renovará, como parece, o se irá de la F-1 dejando un hueco a Raikkonen en McLaren. Y para estas respuestas sí que habrá que esperar a octubre.

El resto ya está muy claro. “Solo estamos decidiendo cuál es el mejor momento para anunciarlo”, explica Toto Wolff, el jefe de Mercedes, desde el 'paddock' de Spielberg, donde este fin de semana se celebra el GP de Austria. Puede ser en la siguiente carrera, en Silverstone, a 40 kilómetros de la sede del equipo en Brakley, o en la siguiente, el GP de Alemania, en el país de origen de Mercedes. En cualquier caso, Lewis Hamilton renovará por dos temporadas, con 50 millones de euros por año, todo un récord en la historia de la F-1.

Cambio de reflamento en el 2021

El inglés ha preferido dejarse las manos libres en el 2021, en el que entra en vigor un reglamento completamente diferente que puede distribuir otro reparto de fuerzas, y para el que Mercedes podría vender su escudería a un grupo chino y permanecer en la F-1, únicamente como motorista. En el caso de Valtteri Bottas, la renovación es, de nuevo, por un año, aunque todo el mundo sabe que otros de los protegidos de Wolff y piloto Mercedes cedido a Force India, Esteban Ocon, es el hombre preparado para un posible recambio del finandés.

En Red Bull todo está claro también. Daniel Ricciardo esperó hasta el último momento por una posibilidad en Mercedes o Ferrari que nunca se concretó, así que se queda en su casa de siempre, eso sí, después de reducir la brecha salarial que arrastraba con su compañero Max Verstappen, situada este año entre los ocho y los 25 millones. “Daniel no tiene una opción deportivamente mejor que Red Bull”, explica Helmut Marko, responsable de los pilotos en la estructura Red Bull. “Solo quedan unos detalles mínimos por concretar, pero espero que se pueda anunciar a lo largo de este gran premio”, aclara el australiano en Austria, la casa de Red Bull.

Red Bull se queda con Ricciardo y Verstappen al volante y con el motor Honda propulsando los monoplazas azules el año que viene, lo que libera a Carlos Sainz para desvincularse definitivamente de la estructura Red Bull y negociar un contrato con Renault, el equipo donde esta temporada disputa el mundial en calidad de cedido. No será difícil. El madrileño quiere quedarse en Renault —donde espera disfrutar de un coche ganador en dos años— y Alain Prost se muestra encantado con el joven madrileño que forma junto a Niko Hulkenberg, una de las parejas más competitivas del Mundial.

Raikkonen quiere estirar su carrera

Será a partir de octubre cuando se resuelvan las pocas incógnitas que faltan para conformar la parrilla. La primera es saber si Ferrari se atreverá a sentar a Charles Leclerc en uno de sus coches. Campeón de la GP3 y la GP2 en las dos últimas temporadas, el joven monegasco de 20 es la sensación de la temporada. Lleva al Alfa Romeo Sauber donde nadie pudo en las últimas temporadas, ha sumado en ocho carreras el doble de puntos para el equipo que todo el año pasado, y sobre todo, hay consenso general en el paddock, de que es un talento natural que parece disponer de la madurez necesaria, incluso en su primer año en F-1.

Si Ferrari se decide por Leclerc, Raikkonen se quedaría sin equipo, aunque todo dependerá del rendimiento del más joven y el más viejo de la parrilla en las próximas diez carreras. “Sí he oído todos eso rumores sobre el año próximo pero no tengo nada que decir, solo que me centro en hacer mi trabajo lo mejor posible”, dice el monegasco miembro de la Ferrari Academy.

La ironía del campeón finlandés

Por el momento, Raikkonen ya se ha movido. Sus mánagers, los hermanos Robertson, trabajan en dos direcciones; regresar al Mundial de Rallyes, donde ya participó en el 2010 —tiene cerrado un test con Toyota— u ocupar la hipotética plaza en McLaren que puede quedar libre si Fernando Alonso decide irse. “¿Si he hablado con McLaren? Sí, bastante, sobre todo, entre 2003 y 2006, cuando piloté para ellos”, dijo el finlandés con ironía en el paddock del Red Bull Ring. “No me interesa hablar de mi futuro. Ya he estado en esta situación otras veces, y nunca lo hice. Ahora tampoco”, zanjó el finlandés.