Es difícil contemplar la frecuencia de un acontecimiento de estas características, ya que 50 años preservando el germen puro del cante sin caer en adulteraciones tan al uso solamente está al alcance de unos cuantos privilegiados. El Pele es un rara avis que se ha posicionado en lo más alto dejándose jirones de vida en cada cante, y ahora, con toda justicia, recibe un homenaje de sus amigos, aunque no estén algunos de los que con tanta frecuencia vienen halagando su grandeza, aunque en su descargo hay que decir que sus agendas pueden ser la consecuencia de no estar presentes en esta histórica noche.

Porque de verdad, el día de hoy pasará a la historia del flamenco en este homenaje, en el que se darán cita unos nombres de los que no se puede albergar ninguna duda de su notable consideración en el universo de este arte.Están todos los que consideran que El Pele ha consolidado una carrera que lo señala como uno de los más grandes en esta media centuria, volcando su apasionada lucha por la dignificación del cante, partiendo de una ortodoxia que ha ido cincelando hasta hoy y que goza del reconocimiento unánime de público y crítica, sin que en los resbaladizos peldaños de la fama haya sufrido ningún traspiés que minimice el grito de su verdad flamenca.

Ese lanzazo que va directamente al corazón del que lo escucha, y que le ha valido el respeto y el reconocimiento, basado en su incontestable verdad y en su capacidad para levantar del asiento al más flemático. Ya nos dijo que hay Pele para rato cuando esquivó esas dentelladas que a veces se presentan en la vida sin avisar, y de las que resurgió con más brío. Ese brío con el que su desgarrado grito traspasará las fronteras de lo jondo y que estará bendecido por sus amigos, volcados generosamente en este acontecimiento. Los nombres de Diego del Morao, Potito, Pilar Astola, Pastora Galván, Rafael Amargo, Inmaculada Aguilar, Remedios Amaya, Cherokee, Pedro El Granaino, Nani Cortes, Kiki Morente, Lya, Aurora Losada, Julián Estrada, Alonso Rancapino, Losada Soul, Lin Cortes, Pepe Habichuela y Manuel Silveria, la dirección artística de Queco y la presentación de los mediáticos Juan y Medio y Rafael Cremades, auguran la crónica de un éxito anunciado. Un cartel que representa una importante parcela de lo mejor del arte flamenco en las tres columnas que lo sostienen. Juventud y veteranía se dan la mano en las bodas de oro de este cantaor tan nuestro, protagonista, junto a otros, de una época dorada del cante que recibirá, como ya se hizo hace algunos meses en Madrid, el incondicional aplauso de la masa de aficionados rendidos a la expresión jonda de este animal flamenco.

CÓRDOBA

TEATRO DE LA AXERQUÍA

VIERNES 18

21.00 HORAS