Desde hoy y hasta el domingo se presenta en la Sala Duque de Rivas de la Escuela de Arte Dramático de Córdoba (ESAD) un musical bajo el título de Hechizo en el País de las Maravillas, un espectáculo con dos funciones diarias a las 17.00 y 19.00 horas. La sala Duque de Rivas ha dado un paso adelante para desligar la función meramente docente como Escuela de Arte Dramático y convertirse, de esta forma, en un espacio teatral abierto a la ciudad desde donde proyectar trabajos que requieran una sala de formato medio o pequeño, pasando a formar parte de lo que se ha venido a llamar Red de Teatros Alternativos. En Hechizo en el País de las Maravillas nos encontramos con la amalgama de una serie de cuentos que definen este país de los sueños infantiles. Son fácilmente reconocibles The princess and the frog y Alicia. Cuando comienza el musical, un terrible hechizo ha convertido el maravilloso paisaje en un bosque encantado, donde la Reina de Corazones, con la ayuda de sombrerero loco y la liebre de marzo, ha arrebatado el trono a la princesa Thiana y Naveen.

Pronto las flores parlantes comunicarán a todos los habitantes el suceso y entre todos ayudarán a Thiana a recuperar su reino y a su amado príncipe. La valentía del Gato con Botas, la fe constante de Blancanieves y los siete enanitos, la inteligencia de Tristeza y la sonrisa de Alegría, ayudarán a Kristoff y Ana a llevarles a los Trolls Piedra del reino de Arismendi los ingredientes para preparar la pócima mágica que rompa de una vez el hechizo del país de las maravillas. De esta manera, Thiana y Naveen podrán reinar y devolver la alegría al reino.

Personajes sacados de mil y un cuentos como si fueran las mil y una noches: de Disney, de Frozen, del Valle de la Miel, de Blancanieves y del Gato recibido como herencia, de cómo un beso puede transformar a un sapo en príncipe. Por otro lado, el próximo 15 de diciembre, a las 21.00 horas, y también en la Sala Duque de Rivas, JunKman Project presenta Matanza Nacional, una pieza interpretada por Pura Mayorgas y Lúa Santos junto a Charlie Topowsky en el papel de matarife. El espacio escénico, dramaturgia y coordinación son de Carlos Baena Alarcón para el primer Festival Radikal.

Matanza Nacional es una pieza poliédrica que se articula en escena a modo de collage con diferentes metáforas. Se trata de hacer un ejercicio de acercamiento a la idiosincrasia de un país en el que un animal, el cerdo, es base importante en toda su cultura. El director de la pieza les manda a las actrices una composición en la que deben introducir más de 30 puntos en un orden aleatorio, y así descubrir cada parte de el/la cerdo/a como mercancía ganadera, como actriz o como mujer. Dentro de estos puntos, les reclama que hablen de estos momentos en los que se sintieron humilladas como actrices, como mujeres. Todo ello en un contexto en el que se les pide que pongan en juego su patrimonio cultural a la vez que muestran sus habilidades. El resultado es más de una hora de verbena, lucha, acción, parodia, ironía, poesía, ritual, con el que recomponer el caos y llegar al objetivo de que existan tantas visiones sobre la pieza como espectadores puedan disfrutarla.

CÓRDOBA . SALA DUQUE DE RIVAS/ DEL 9 AL 11 / 17.00 Y 19.00 H.