En cualquier época del año, Andalucía es un destino turístico de primer orden debido a la amplia oferta patrimonial, de ocio, cultural o gastronómica que presenta. No obstante, la primavera abre ante el viajero un gran abanico de posibilidades para disfrutar inolvidables experiencias, momentos y destinos. Se trata de tradiciones de enorme atractivo y repercusión internacional, como las Cruces o los Patios de Córdoba, la Feria de Sevilla, de Jerez y de Córdoba, las romerías de El Rocío o de la Virgen de la Cabeza en Andújar, así como el Gran Premio de Motociclismo de Jerez. A estas citas hay que añadir la oferta de interior y naturaleza, con parques naturales como Doñana, Sierra Nevada, Cazorla o Grazalema, que en primavera se encuentran en todo su esplendor, sin olvidar los atractivos de disfrutar de unos días en el interior de Andalucía, descubriendo las ciudades medias o las distintas comarcas.

Además, con el comienzo del buen tiempo, una excelente propuesta es disfrutar del sol y el mar en el litoral andaluz, recorrer las costas de Málaga, Cádiz, Huelva, Granada o Almería, desde extensas playas de fina arena hasta calas escondidas. Incluso existe la posibilidad de practicar deportes de nieve en Sierra Nevada, que este año ha clausurado la temporada el pasado 23 de abril.

Córdoba también es una visita ineludible en primavera, con citas en la ciudad de los Califas como los afamados patios, reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco. Los visitantes pueden conocer de cerca medio centenar de patios decorados con miles de flores para contemplar entre el olor al jazmín, claveles y rosas. Y otra de as citas ineludibles es la feria, el colofón al mes más alegre, festivo y florido de Córdoba.

También tiene mucho peso la romería del Rocío, la mayor peregrinación de España, que este año comienza su camino a mediados de mayo a través de senderos milenarios que transcurren por las proximidades del Guadalquivir. El Rocío es una mezcla de sentimientos entrelazados: alegría, cantos y fiesta, frente a promesas y devoción. La noche del domingo nadie duerme en espera de poder entrar al templo para pasear a la Blanca Paloma. El salto es el momento de mayor fervor, cuando los almonteños toman la ermita, saltan la reja y pasean a la Virgen por su aldea.

Y a finales de la primavera se suceden por toda Andalucía las festividades del Corpus, una de las fiestas más antiguas de España y que tienen un especial protagonismo en poblaciones como Sevilla y Granada, ciudad esta última donde además coincide con la feria. La feria en sí comienza el lunes anterior al jueves del Corpus y finaliza el domingo siguiente. Se sitúa en un recinto a las afueras de la ciudad con casetas y atracciones de todo tipo, lugar para beber, comer y bailar. El Corpus Christi sevillano comienza con una misa celebrada en la Catedral y la procesión inicia su salida por la puerta de San Miguel. Los Seises, un grupo de baile que tiene sus orígenes en el siglo XV formado por niños de corta edad, acompañan a la Custodia y bailan vestidos de rojo y cubiertos por sombrero.

oferta

Andalucía es un destino que incluye patrimonio, ocio, cultura, naturaleza y gastronomía