La Universidad Loyola Andalucía celebró ayer en San Hipólito la festividad de Santo Tomás de Aquino con el reconocimiento a 21 miembros de su comunidad, representantes del personal docente, investigador, de administración y servicios que han contribuido a la puesta en marcha de la Universidad. "Estos premios representan a toda la comunidad de Loyola, hay que reconocer y agradecer lo que se hace bien, porque sois el pilar de la institución: buen trabajo", señaló el rector, Gabriel Pérez Alcalá, que subrayó la cualificación del personal docente y de administración de servicios, una plantilla que se ha duplicado en los tres últimos años "y que seguirá creciendo en número y diversidad: somos cada vez más diversos, y esa universalidad nos hace más humanos y nos acerca a la misión de una universidad de la Compañía de Jesús".

El simbolismo de la elección de San Hipólito para celebrar este primer acto ha sido destacada por Ildefonso Camacho, presidente de la Fundación Universidad Loyola Andalucía, que se refirió al patio de San Hipólito "donde nació ETEA, el tren que puso en marcha Jaime Loring, sin el cual nunca hubiera sido posible esta universidad".

Entre los premiados, el rector destacó la colaboración especial y la trayectoria de César Hervás, catedrático de la Universidad de Córdoba, "profesor y mentor en ETEA de muchos de los profesores que ahora estamos en Loyola".