Caballistas, carrozas engalanadas y romeros vestidos con los trajes típicos forman el cortejo que, cada mes de mayo, se dirige camino a Linares para recibir la bendición de la Virgen entre cantos y bailes. La peregrinación finaliza en el Santuario de Linares, donde tras la misa se hace entrega de los premios a las mejores carrozas. Salida a las 9.00 horas.