Córdoba no tiene mar, pero tiene dos embalses --Iznájar y La Breña-- que hacen las delicias de cualquier aficionado a la navegación. Y ayer, el sábado más cercano a la festividad de la Virgen del Carmen, el Club Náutico de Córdoba celebró, como viene haciendo desde hace 36 años, una jornada de convivencia en la sede del colectivo y en las aguas del pantano de Almodóvar del Río. Más de 200 personas acudieron a la cita, entre ellas, como invitados, el portavoz de UCOR en el Ayuntamiento de Córdoba, Rafael Gómez, y algunos miembros del grupo municipal socialista.

Una misa en la sede del club social, inaugurada hace algo más de un año, dio paso a las actividades lúdicas, que se prolongaron hasta la tarde. La principal, un paseo por el pantano acompañando a la Virgen del Carmen en el que participaron 34 embarcaciones de recreo, engalanadas para la ocasión. Juntas, y en un ambiente festivo, llegaron hasta el puente de la Cabrilla, en cuyas inmediaciones se encuentra una antigua ermita frente a la cual los navegantes corearon la Salve antes de iniciar el regreso y continuar con la fiesta en tierra, donde les esperaban unos aperitivos y un perol para todo el que quiso sumarse a la fiesta.

Durante el recorrido los barcos del club se cruzaron con otras embarcaciones particulares y con los participantes de la primera Fiesta del Agua, que se celebró durante todo el día en el embalse.