El vídeo que el equipo de Susana Díaz hizo correr por las redes sociales hace unos días se titula Esperanza y fuerza. Y las va a necesitar, según la encuesta del Gabinete de Estudios Sociales y Opinión Pública (Gesop) encargada por este diario. La presidenta de la Junta de Andalucía no es la preferida de los votantes socialistas.

Ni tampoco del conjunto de los ciudadanos. El que recibe más apoyos en ambos casos es Pedro Sánchez. Aunque Díaz puede agarrarse a un dato nada despreciable: la mayoría de los electores que apostaron por el PSOE el 26-J y también la mayoría de los españoles, sea cual sea su tendencia política, consideran que será la próxima líder del partido. Y eso que la encuesta se realizó entre los días 19 y 22, justo cuando Sánchez (el lunes 20) presentó su proyecto como candidato.

Si pudieran votar en las primarias, el 36,2% de los ciudadanos elegirían a Sánchez; el 27,4%, al exlendakari Patxi López, y el 22,5%, a Díaz. La diferencia entre el exsecretario general y la dirigente sevillana es todavía mayor entre los votantes socialistas: 49,5% frente al 16%. López vuelve a quedarse en medio con el 26,7% de los respaldos. Y en ese sector el político mejor valorado es Sánchez, con un 6,4, después el exlendakari (6) y Díaz queda en último lugar y suspende (4,9).

La política tiene mucho predicamento entre los votantes del PP (el 49,8% la elegiría a ella) y López, entre los de Ciudadanos. Los simpatizantes naranjas apostarían primero por López y, en segundo lugar, por Díaz.

IMAGINARIO COLECTIVO / Ahora bien, cuando los entrevistados que apoyaron a los socialistas en junio tuvieron que responder la pregunta de «si los candidatos acabaran siendo estos (tres), ¿quién cree que ganaría las primarias del PSOE?», una abrumadora mayoría (42,2%) respondió Susana Díaz. El 27,7% dijo Pedro Sánchez, y el 16%, Patxi López.

La política andaluza es a ojos de todos la candidata del aparato, cuya opinión ha sido determinante en la elección de los últimos dirigentes del partido, como ha asumido el imaginario colectivo en el que se ha impuesto como ganadora. Díaz está respaldada por muchos barones y por pesos que, a pesar de sus trayectorias, se siguen considerando pesados en el PSOE como Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero.

La encuesta señala que Sánchez se impone en casi todas las autonomías, incluida Andalucía, el territorio de la presidenta de la Junta (28,3% frente a 27,8%). Díaz solo le gana en Galicia (31,8% contra 27,3%).

La sevillana tiene un problema en Euskadi y Cataluña, donde el exsecretario general logra un apoyo del 52,9% de los encuestados y ella solo el 12,4%. Además, si Sánchez es el abanderado del «no es no», a Díaz se le recuerda muy implicada en la salida del secretario general, la formación de la gestora y la abstención del PSOE en la investidura del presidente.