La mayoría de los vascos (un 62 %) está a favor de que se plantee en Euskadi un referéndum sobre una posible independencia de España, una consulta en la que habría un empate técnico entre el sí (35 %) y el no (34 %).

Así se desprende del último Euskobarómetro, el estudio sociológico que la Universidad del País Vasco hace semestralmente, presentado hoy en Bilbao por su director, el catedrático Francisco Llera, y elaborado sobre la base de 600 entrevistas realizadas entre los días 27 de octubre y 14 de noviembre.

Al albur de la situación en Cataluña y del referéndum en Escocia, los autores de la encuesta han preguntado a los vascos sobre una posible consulta en Euskadi.

Según este estudio, son una mayoría creciente (un 62 %), ocho puntos más que en el mismo estudio de hace un año, los vascos que están a favor de que se plantee en Euskadi un referéndum sobre una posible independencia de España, con un 26 % que está en contra y un 12 % que no se pronuncia.

Sin embargo, esa mayoría favorable al referéndum perdería casi veinte puntos (45 %) si Navarra quedase excluida del mismo.

Además, una mayoría de casi tres de cada cuatro (72 %) creen que la decisión que resultase debería ser la de la mayoría del conjunto de la ciudadanía vasca, independientemente del voto en cada territorio.

Lo que estaría en el aire sería el resultado: si mañana se celebrase este referéndum de independencia, se daría una división de opiniones: el sí, mucho más decantado de salida, supera por muy poco (35 %) -sobre todo, en Guipúzcoa y Bizkaia (37 %)-, al no (34 %), seguramente menos movilizado a priori, según los autores del estudio, lo que les hace pensar en un "empate técnico". El no se daría sobre todo en Álava (41 %).

A los que dicen que votarían sí, los autores les han preguntado hasta qué punto mantendrían esa posición favorable a la independencia en caso de que ésta supusiese una salida de la UE y, al mismo tiempo, una pérdida de posiciones en el mercado español. En ambos casos el sí se reduciría al 28 % y 27 %, respectivamente.

El sí se reduciría aún más (al 25 %) si ese proceso implicase que Navarra quedase fuera del País Vasco y, al mismo tiempo, vizcaínos y guipuzcoanos tampoco estarían dispuestos a aceptar un sí (19 %) que supusiese la pérdida de Álava.

Respecto a otras cuestiones planteadas en el estudio, en política destaca que el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, hasta ahora desconocido en las encuestas, ha irrumpido como el líder más valorado por los ciudadanos vascos y el único que logra el aprobado, con una nota del 5,6. Además, ha empeorado la nota del Gobierno Vasco, que se queda en un 4,7.

Respecto al terrorismo, tres años después del cese de la violencia terrorista, los vascos han aumentado de manera significativa su desconfianza en la voluntad de ETA de poner fin a la violencia y en la de la izquierda abertzale de aceptar las reglas democráticas.

Además, la sociedad vasca sigue dividida y poco proclive al perdón y la reinserción de los presos por terrorismo, con dos de cada cinco vascos (38 %) que piensan que todos los terroristas que se arrepientan y expresen su decisión de abandonar las armas deberían beneficiarse de las medidas de reinserción.

Frente a ellos, un 32 %, opina que la reinserción sólo podría aplicarse a aquellos que no tengan delitos de sangre, y siguen siendo un 23 % los que no están dispuestos a perdonar y creen que deben cumplir íntegramente sus penas.