Las elecciones primarias en el PSOE se plantean como un duelo de liderazgos entre Pedro Sánchez, Susana Díaz y Patxi López en el que los contenidos ocupan un segundo nivel. Los tres comparten las mismas esencias socialistas pero cada uno de ellos busca diferenciarse de los demás, no solo con su propio estilo de liderazgo, sino también con la ayuda de gurús económicos.

El veterano Manuel Escudero se ha convertido en el economista de cabecera de Pedro Sánchez. Manuel de la Rocha Vázquez -que fue secretario de Economía en la comisión ejecutiva del PSOE de Pedro Sánchez hasta octubre pasado-, por su parte, es el principal asesor económico de Patxi López. Al economista José Carlos Díezse le atribuye ser consejero en la sombra de Susana Díaz, algo que el propio Díez evita reconocer para no dañar la imagen de imparcialidad que corresponde a quien ha sido encargado de redactar la ponencia económica que los socialistas deberán debatir en su trascendental congreso confederal del 17 y 18 de junio. "Tengo buena relación con Susana Díaz" es lo máximo que reconoce el mediático economista José Carlos Díez al ser interrogado por su relación con la líder andaluza.

TRES DOCUMENTOS

"Foro 2020: Una economía social y ambientalmente sostenible" es el título que lleva la ponencia económica que la gestora ha encargado a José Carlos Díez. En su redacción han colaborado más de 80 expertos de diferentes corrientes socialistas, donde se mezclan colaboradores de los tres candidatos a las primarias y aunque Díez evita identificar su núcleo de principales colaboradores, otras fuentes socialistas señalan al concejal de Madrid Antonio Miguel Carmona como principal colaborador.

De la Rocha ha participado activamente en el capítulo económico del documento "Más de 100 razones para unir el PSOE" que resume las propuestas de Patxi López en su candidatura para liderar el partido socialista. Los economistas Antonio González (exsecretario general de Empleo) Alain Cuenca (exalto cargo del Ministerio de Hacienda, experto en financiación autonómica), José Luis Curbelo (experto en economía internacional) o el diputadoRafael Simancas forman parte del núcleo de economistas más cercano al proyecto de Patxi López.

En el caso de Pedro Sánchez, la lista de renombrados economistas que junto a Manu Escudero están participando en el desarrollo de sus propuestas económicas es amplísima. Figuran nombres como los de la exministra Cristina Narbona, el exsindicalista Toni Ferrer, el experto en energía Jorge Fabra (de Economistas frente a la Crisis) o el exconsejero balear de Economía Carles Manera. Decenas de economistas trabajan en torno en comisiones y subcomisiones de distintas áreas para dotar de propuestas y contenidos al documento programático de Pedro Sánchez, cuyo título “Por una nueva socialdemocracia” resume la ambición estratégica de este proyecto que pretende ubicarse en la izquierda de la izquierda socialista.

El DEBATE DE LA RENTA BÁSICA

En este colectivo de quienes podrían ser tildados como "los economistas del PSOE" hay exaltos cargos, diputados, eurodiputados y concejales, académicos y profesionales de despachos. La mayoría de ellos son habituales colaboradores o están adscritos a foros de opinión como Economistas frente a la Crisis, Economistas sin Fronteras,Agenda Pública, Contexto, Foro de Economía Progresista y otros dónde publican artículos en los que siempre subyace el mismo objetivo que persiguen todos ellos: cómo obtener de la socialdemocracia respuestas a los nuevos retos de igualdad, globalización, robotización, medio ambiente y calidad de los servicios públicos y el empleo. Hay economistas de la órbita socialista como el exministro Valeriano Gómez, el diputado Pedro Saura o el eurodiputado Jonás Fernández cuya adscripción a uno u otro líder no se ha hecho expresa. El exasesor económico y exministro Jordi Sevilla se ha apartado expresamente de este debate.

Las diferencias suelen ser de matiz, aunque existen algunos hechos diferenciales. Los documentos de Escudero y de De la Rocha hablan, por ejemplo, de derogar o “tumbar” la reforma laboral mientras que el de Díez opta por la expresión más tibia de “un nuevo marco de relaciones laborales”. Los dos primeros apuestan claramente por una subida progresiva de impuestos, mientras que el segundo evita ningún giro de este tipo. El ingreso mínimo vital -que ya planteó el PSOE en su anterior programa electoral y que ha sido adoptado por el Paramento a iniciativa sindical- es la fórmula de garantía de renta por la que apuestan los documentos de López y de Díez. Pedro Sánchez aboga por avanzar hacia una fórmula de renta básica universal (en forma de impuesto negativo para todos los ciudadanos) muy cercana a los postulados de Podemos. Este promete ser uno de los terrenos donde se librará la batalla ideológica.Sobre todo, después del sonoro error reconocido por el propio Díez que cometió cuando en un debate televisivo afirmó que conla renta básica habría que poner "francotiradores" en las fronteras contra los inmigrantes.