El exmarido de la exministra Ana Mato, el exsenador del PP Jesús Sepúlveda, admitió hoy haber sido agasajado por el considerado cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, con viajes, la decoración de los cumpleaños de sus hijos y que le adelantó el dinero para comprar un jaguar, pero negó que esos regalos se produjeran a cambio de algo. En lo que sí tuvo cuidado el exalcalde de Pozuelo de Alarcón fue en desvincular a su exesposa de haber recibido obsequios y en negar que él cobrara de Correa, su número dos, Pablo Crespo, o de Álvaro Pérez, el Bigotes.

Sepúlveda, que se enfrenta a 15 años y cuatro meses de cárcel, negó responder a las iniciales J.S. que figuran en la contabilidad reflejada en el pendrive intervenido al contable de Correa. Y fue categórico al negar haber cobrado en algún momento del empresario o sus empleados, aunque sí admitió los cohechos por los que está acusado. Según su versión, ni la decoración de los cumpleaños de sus hijos, ni los viajes que le regaló Correa, ni la, al menos, ayuda que le prestó para comprarse un jaguar pretendían que él mediara en alguna adjudicación. De hecho, sostuvo que Special Events no hizo ningún acto para el PP de Pozuelo, aunque admitió que podía haberlo hecho para el partido regional.

El acusado dijo que él no tenía posibilidad de intervenir en las campañas electorales del partido, pese a que formaba parte del comité electoral, ni podía intermediar en adjudicaciones como senador. Asimismo, negó haber tenido una participación en Spinaker para ocultar, junto con el extesorero Luis Bárcenas y con el exdiputado Jesús Merino, los pagos ilícitos que les hacía Correa, según Anticorrupción.

"LE VENÍA BIEN"

Según Sepúlveda, el día que se iba a comprar el jaguar se encontró con Correa en la sede del partido, en la calle Génova, y se lo comentó. El empresario se ofreció a acompañarle y una vez en el concesionario, después de que el exsenador pagara la entrada, le dijo que a él "le venía bien" comprar el vehículo para su empresa, para que constara como "gastos", y así se podía ahorrar el IVA. El exdirigente del PP dice que dudó pero al final aceptó el ofrecimiento. Le dio un BMW viejo y pidió un crédito de 18.000 euros para devolverle a Correa lo que había adelantado.

Y en cuanto al Rand Rover que Correa dijo ante el tribunal que le había regalado, Sepúlveda dijo que lo adquirió a través de una empresa de renting en el concesionario que le indicó el empresario. A un amigo que le adelantó el pago de la entrada de 24.000 euros, le dejó a deber 7.000, pero aseguró que él pagaba cuotas mensuales de 1.300 euros.

"SÓLO GLOBOS"

También admitió que la "amistad" que dijo haber adquirido con Correa, a base de hacer viajes para el partido para la preparación de actos del partido, el empresario le pagaba viajes, porque "a él no le costaban nada" y se ocupó de la decoración de los cumpleaños de su hija pequeña. "Era solo cuestión de unos globos", añadió.

En lo que sí fue cuidadoso fue en negar que Ana Mato hubiera recibido obsequios de Correa. "No recuerdo. Creo que no. Estoy convencido de que no", declaró justo antes de añadir que, aunque tenían gastos comunes, como hipoteca y colegios de sus hijos, cada uno era independiente económicamente.